Cooper Flagg: El fenómeno adolescente que ya sacude la NBA Summer League
A pesar de un debut fallido, el novato de los Mavericks causa sensación con su ética de juego y potencial defensivo
Las luces de Las Vegas brillan con intensidad durante la NBA Summer League, pero una en particular ha captado toda la atención: Cooper Flagg. Con tan solo 17 años al momento del draft y considerado por muchos como el mejor prospecto escolar desde LeBron James, su debut profesional no fue perfecto... pero sí revelador.
Mucho más que una estadística
Flagg terminó su primer partido con apenas 10 puntos tras lanzar 5 de 21 tiros, incluyendo un 0 de 5 desde la línea de tres. Nada del otro mundo... hasta que se observa más allá de los números.
En 31 minutos sobre la cancha, el joven de Dallas logró:
- 6 rebotes
- 4 asistencias
- 3 robos
- 1 tapón clave en los últimos minutos
Esa última acción fue vital, ya que bloqueó un intento de DJ Steward cuando los Mavericks perdían por un punto. Acto seguido, Ryan Nembhard anotó un triple decisivo tras pase de Flagg. Dallas venció 87-85 a los Lakers.
Ryan Nembhard: “Todo lo que quiere es ganar. Puede defender cinco posiciones y anotar como pocos”.
¿Es este el fenómeno que todos esperaban?
El nombre Cooper Flagg resonó por primera vez con fuerza nacional cuando lideró con 16 años al equipo estadounidense en el Mundial U17 de FIBA en 2022. Desde entonces, ha sido considerado un prodigio. Con su físico atlético (2,03 metros y 93 kg), su versatilidad y actitud parecen recuperar una esencia de “jugador total” que recuerda a Scottie Pippen o Kevin Garnett.
Durante la secundaria en Montverde Academy, Flagg alcanzó promedios de 16.1 puntos, 7.6 rebotes, 3.9 asistencias, 2.7 tapas y 1.6 robos. Fue nombrado Gatorade Player of the Year y Naismith Prep Player of the Year en su último año, convirtiéndose en el primer jugador white American en recibir ese doble honor desde Kevin Love en 2007.
Debut nervioso, corazón de acero
Tras el debut, Flagg fue honesto:
“Quizá fue uno de los peores partidos de mi vida”, dijo Flagg, agregando que el nuevo entorno profesional fue un factor. “Pero sé que mis entrenadores y mis compañeros creen en mí, y eso me dio la tranquilidad para seguir jugando”.
El entrenador de los Mavericks en el torneo de verano, Josh Broghamer, se mostró impresionado por la madurez del joven:
“Flagg hace las jugadas correctas una y otra vez. Ya sea un pase acertado, una posesión defensiva o una anotación oportuna. Todo está anunciado: es un ganador”.
Flagg: ADN de competición
Una de las características que más admira el entorno NBA es el ímpetu competitivo de Cooper. Durante todo el encuentro, los Lakers lo defendieron a todo campo, lo atraparon en cada oportunidad y lo jugaron con físico. Lejos de rehuir el contacto, respondió con intensidad.
Bronny James, quien lo marcó buena parte del partido, fue categórico:
“Es rápido, fuerte y grande. Lo vi en el college. Es increíble. Va a ser algo especial”, declaró el hijo de LeBron.
Comparaciones tempranas, promesas futuras
Los expertos ya comienzan a establecer paralelismos. Algunos lo comparan con Jayson Tatum por su capacidad ofensiva fluida, otros con Draymond Green por su lectura defensiva, mientras que algunos más atrevidos lo proyectan como un híbrido entre Larry Bird y Kawhi Leonard.
¿Realista? Quizá es demasiado pronto, pero hay evidencia que alimenta la ilusión:
- Puede defender cinco posiciones según su entrenador y compañeros
- Entiende la dinámica colectiva mejor que muchos profesionales
- Enorme ética de trabajo desde su etapa escolar
- Actitud ganadora: prefiere las victorias al lucimiento personal
Ryan Nembhard y el efecto contagio
Ryan Nembhard, compañero de Flagg en este equipo de verano, no escatima elogios. Incluso cuando Flagg falla, genera oportunidades. “Tiene una gravedad que no se ve en alguien tan joven”, dijo, destacando cómo su mera presencia abre espacios ofensivos.
Esta capacidad de crear juego más allá de anotar es lo que ya empieza a diferenciar a Flagg del típico novato de la liga. Los números pueden mejorar —y lo harán— pero la capacidad de influir en el juego está intacta desde el día uno.
El contexto: la presión del fenómeno
La situación de Flagg no es sencilla: es la cara visible de una nueva generación de prospectos escolares que saltan directamente desde la secundaria al profesionalismo. Su llegada llena un vacío que, desde LeBron James, solo jugadores como Zion Williamson o Victor Wembanyama generaron a nivel mediático.
La expectativa de éxito inmediato puede llegar a ser una cárcel, razón por la cual sus errores han sido tan discutidos como sus virtudes.
¿Qué sigue para Cooper Flagg?
Si bien el debut no brilló en el marcador, hay algo claro: Flagg ya está en la conversación más importante. Es el centro de atención, aun sin anotar 30 puntos. Lo que deja entrever que, cuando ajuste su puntería y domine el ritmo de juego, será una fuerza imparable.
En palabras del analista de ESPN, Mike Schmitz:
“Cooper Flagg será All-Star. La pregunta no es si lo será, sino cuántas veces...”
Es posible que no dominemos aún la magnitud del jugador en formación que está emergiendo. Pero si algo ha dejado claro su debut, es que no hay que mirar solo el marcador cuando pisa la cancha: Cooper Flagg ya transforma equipos.