¿Se acerca el fin de los errores arbitrales en la MLB? Lo que se sabe del sistema ABS
La liga experimenta con la tecnología de robo-umpires en partidos reales y apunta a implementarla pronto en la temporada regular
La Major League Baseball (MLB) ha dado un paso más hacia la automatización del juego con la implementación del sistema ABS (Automated Ball-Strike System) o sistema automatizado de bolas y strikes. La noticia más reciente confirma que este sistema será utilizado en el próximo All-Star Game de 2024 en Atlanta, y todo parece indicar que su uso podría extenderse a la temporada regular tan pronto como en 2025.
¿Qué es exactamente el sistema ABS?
El sistema ABS, coloquialmente conocido como 'robo-umpire', utiliza tecnología avanzada para determinar con precisión si un lanzamiento es strike o bola, eliminando así la subjetividad humana del árbitro principal detrás del plato. Se emplean cámaras de alta resolución y radares que detectan el punto exacto por donde cruza la pelota.
Desde 2019, este sistema ha sido probado extensamente en las ligas menores y más recientemente en los juegos de pretemporada de este 2024. Según datos oficiales de la MLB:
- Se utilizaron 288 juegos de pretemporada para probar el ABS.
- Hubo 1,182 desafíos relacionados con bolas y strikes.
- El 52.2% de los desafíos resultaron exitosos para los equipos, lo que significa que el árbitro original se equivocó en más de la mitad de los casos apelados.
Además, durante la actual temporada regular, los datos de MLB Statcast muestran que:
- El 10.9% de los lanzamientos dentro de la zona de strike fueron incorrectamente cantados como bolas.
- El 6.3% de los lanzamientos fuera de la zona fueron cantados erroneamente como strikes.
¿Por qué ahora? La presión sobre el arbitraje humano
La presión para implementar esta tecnología también es resultado del creciente descontento de los fanáticos, analistas y hasta los propios jugadores. El Comisionado de la MLB, Rob Manfred, reconoció este fenómeno:
“Tengo la impresión clara de que usar el ABS en la primavera ha hecho que más personas se quejen de las decisiones de bolas y strikes por correo electrónico. Es una especie de sistema no científico que uso: el volumen de mi correo electrónico personal.”
Rob Manfred también confirmó que el sistema será evaluado oficialmente por el comité de competencia, el cual está compuesto por representantes de la gerencia y jugadores. Se espera que esto ocurra antes del final de la temporada para potencialmente implementarlo como estándar en 2025.
Las repercusiones para el juego
La inclusión de ABS en los juegos llevará a un cambio drástico en la forma en la que se juega y se percibe el béisbol. Algunos de los posibles efectos incluyen:
- Mayor precisión y justicia. Los errores humanos pueden cambiar el rumbo de un juego. El ABS apunta a eliminar esos errores.
- Menos discusión con los árbitros, ya que sus decisiones estarán respaldadas por tecnología.
- Velocidad en el juego, ya que las decisiones serán más rápidas y menos debatidas.
- Una posible reducción en la influencia de receptores defensivos ('framers'), quienes tradicionalmente manipulan visualmente los lanzamientos para obtener strikes.
¿Qué opinan los jugadores y entrenadores?
La MLB se ha mostrado cautelosa al informar completamente las reacciones de jugadores y entrenadores, pero algunas entrevistas y publicaciones han dejado ver posturas divididas.
- Max Scherzer, lanzador y figura de los Texas Rangers: “Prefiero la intervención humana. Pero si el sistema ABS es más preciso que el humano, debemos considerarlo en playoffs”.
- JT Realmuto, uno de los mejores receptores defensivos de la liga, ha sido crítico con el ABS por su impacto en una habilidad altamente valorada: el 'framing'.
- Otros jugadores jóvenes lo ven como una oportunidad para jugar en condiciones más justas, especialmente los menos conocidos que han sufrido malas decisiones arbitrales.
El caso de la Liga Atlántica y la Triple-A
La Atlantic League fue pionera en los experimentos de MLB con el sistema ABS. Posteriormente, la liga Triple-A usó dos versiones distintas del sistema:
- Un sistema completamente automatizado (ABS completo que canta bolas y strikes sin intervención humana).
- Un sistema híbrido de “desafío” o replay review, donde ciertas decisiones del umpire pueden ser cuestionadas por el equipo (muy parecido a lo que se usará en el All-Star Game).
En ambos casos, los resultados llevaron a un aumento en las decisiones correctas y una notable reducción en las discusiones entre jugadores y umpires.
¿Podemos esperar una implementación total en 2025?
Todo indica que 2025 podría ser el primer año en que la MLB dé el salto definitivo hacia los robot-umpires en temporada regular, al menos en formato híbrido. Es probable que el sistema:
- Se utilice en todos los estadios de forma uniforme.
- Incluya desafíos limitados por equipo, similar al sistema de revisión de jugadas actuales.
- Implemente animaciones en pantalla para el público en vivo, tal como se hizo exitosamente en pretemporada.
¿Será esto el fin de la zona 'imaginaria' de strikes?
Hasta ahora, la zona de strike oficial es un área tridimensional que varía con la contextura del bateador, lo cual complica la precisión del ABS. Aunque avanzado, el sistema debe seguir adaptándose para equilibrar lo estándar con lo personalizado. Así lo explicó Jason Stark, analista de The Athletic:
“Mientras el ABS sea calibrado correctamente y los datos reflejen el comportamiento real del pitch, estamos ante la evolución más significativa del arbitraje en cien años.”
¿Y los aficionados?
Las redes sociales han sido terreno fértil para los fanáticos que exigen justicia deportiva y critican los errores arbitrales. Solo basta ver reacciones virales tras lanzamientos cantados erróneamente como strikes y que terminan costando juegos o series completas.
La llegada del ABS tiene potencial para devolver la credibilidad y exactitud en momentos clave, especialmente en playoffs y Serie Mundial donde cada pitch cuenta.
Tal y como pasó con la repetición instantánea en otras disciplinas como el tenis o el fútbol (VAR), la tecnología ha llegado para quedarse. Y aunque el romanticismo del juego clásico siempre tendrá su lugar, el béisbol del futuro será más preciso, más justo, y también más técnico.