Boston Red Sox: ¿Fin del camino o principio de una remontada?

Con seis derrotas consecutivas y una ofensiva poco efectiva, los Medias Rojas enfrentan un momento bisagra en su temporada

Una racha alarmante en Boston

Los Boston Red Sox atraviesan un momento crítico. Con una racha de seis derrotas consecutivas, el equipo dirigido por Alex Cora se enfrenta al reto de evitar que la temporada 2024 se les escape de las manos. Actualmente ostentan un récord de 40-43 y se ubican en la cuarta posición del Este de la Liga Americana, por detrás de Yankees, Orioles y Blue Jays.

Más allá de los fríos números, lo preocupante es la forma. En los últimos diez encuentros, los Red Sox tienen un promedio de bateo colectivo de .184 y una ERA de 4.55. Han sido superados por 24 carreras por sus rivales en ese período. La ofensiva ha desaparecido, y las ausencias por lesión han afectado radicalmente al rendimiento colectivo.

Las lesiones: el enemigo oculto

El hospital parece competir con el campo de juego en Boston. Los nombres en la lista de lesionados asustan:

  • Triston Casas (60-Día IL, rodilla)
  • Kutter Crawford (60-Día IL, rodilla)
  • Masataka Yoshida (60-Día IL, hombro)
  • Jordan Hicks (15-Día IL, dedo del pie)
  • Tanner Houck (15-Día IL, flexor)

La lista sigue. Las lesiones han mermado la profundidad del bullpen y la consistencia de la ofensiva, obligando a jugadores novatos o de menor experiencia a tomar protagonismo antes de tiempo. Un claro ejemplo es Ceddanne Rafaela, quien aunque ha tenido buenos momentos, no puede cargar con todo el peso ofensivo del equipo.

Lucas Giolito: ¿solución o nuevo problema?

Uno de los grandes fichajes para esta temporada fue Lucas Giolito. Sin embargo, su rendimiento ha sido intermitente. El derecho tiene un récord de 3-1, pero con una abultada ERA de 4.53 y WHIP de 1.37. Esto refleja su dificultad para evitar tráfico en las bases, un problema creciente en su carrera desde su All-Star de 2019.

“Estamos en medio de una tormenta, pero todavía queda mucha temporada”, dijo Alex Cora tras la última derrota ante los Blue Jays.

El contraste canadiense: Blue Jays al alza

El contraste no podría ser mayor. Los Toronto Blue Jays, terceros en la división con récord de 44-37, han ganado seis de sus últimos diez juegos. Su ofensiva está chispeante, con un promedio de bateo de .281 en este tramo y un sólido rendimiento monticular con ERA de 3.20.

Una combinación letal ha sido Bo Bichette y George Springer. Bichette, aunque irregular durante buena parte del año, ha despertado recientemente con 15 hits en sus últimos 49 turnos. Springer, por su parte, es sinónimo de poder en la parte alta del lineup.

Una serie que puede marcar el rumbo

El juego del sábado ante Toronto no es uno más. Es el noveno enfrentamiento entre ambos equipos esta temporada, y Toronto ya domina la serie 6-2. Ganar esta serie sería mucho más que un alivio para Boston: podría representar el punto de inflexión necesario para remontar.

Sin embargo, las estadísticas y la actualidad no ayudan. Los Red Sox tienen una pobre marca de 22-18 en casa, y han sido dominados ampliamente en esta serie particular. En la parte estratégica, saben que si quieren aspirar a meterse en la conversación por un wild card, deben comenzar esa remontada ya mismo.

Los factores clave para una resurrección

Para que los Medias Rojas puedan revertir esta situación, deben atender cuatro frentes:

  1. Recuperar lesionados claves: especialmente en el cuerpo de lanzadores. Sin una rotación sólida, es difícil competir en el Este de la Americana.
  2. Encender el bate: Con un promedio de bateo tan bajo y apenas dos jugadores superando los .250 en los últimos diez juegos, la ofensiva debe reaccionar.
  3. Fortalecer el bullpen: En especial si el equipo no consigue profundidad en sus starters.
  4. Mentalidad: La presión de Boston no perdona, y muchos jóvenes podrían verse sobrepasados. El rol de Alex Cora como líder emocional será clave.

¿Un déjà vu de temporadas pasadas?

Los Red Sox no son extraños a las montañas rusas. En 2022 ya habían tenido una primera mitad prometedora solo para desplomarse después del All-Star. Y en 2023 apenas pudieron superar el récord de .500 con un equipo lleno de inconsistencias.

“Este equipo necesita recordar que tiene talento para competir, pero el talento sin ejecución es solo una ilusión”, opinó el periodista Michael Silverman en el Boston Herald.

Apuestas y presión mediática

Según BetMGM, los Red Sox son considerados underdogs (+108) frente a los Blue Jays (-128) para el partido del sábado. La línea de más/ménos en 9 carreras sugiere que se espera un juego de bateo pesado, lo que difícilmente beneficie a un equipo en medio de una anemia ofensiva.

Además, la presión mediática en Boston se ha intensificado. Programas radiales como 98.5 The Sports Hub se han volcado en críticas hacia la gerencia y el manager, exigiendo movimientos en la plantilla o estrategias más agresivas con las jóvenes promesas.

¿Comprar o vender?

Con la fecha límite de traspasos (Trade Deadline) acercándose el 31 de julio, Boston debe tomar una decisión clave: ¿ser compradores o vendedores? De no mejorar en los próximos diez días, podrían optar por vender activos como Wilyer Abreu o incluso algún brazo veterano en el bullpen.

Históricamente, los Red Sox han sido estratégicos en este aspecto. En 2018, sumaron a piezas como Steve Pearce que eventualmente les ayudaron a ganar la Serie Mundial. Una situación como la actual podría repetir esa lógica si vuelven al camino del triunfo pronto.

Los aficionados: divididos pero expectantes

En redes sociales, la afición está dividida. Algunos abogan por una reconstrucción más profunda, dándole espacio a los jóvenes como Mayer, Anthony o Bleis, mientras otros insisten en que aún hay tiempo para rescatar esta campaña.

Una cosa es segura: si los Red Sox quieren volver a ser tomados en serio en la MLB 2024, la reacción debe comenzar ya. Y qué mejor oportunidad que ganar a un rival divisional como Toronto para demostrar que el corazón de Boston sigue latiendo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press