Los Marlins resurgen con dramatismo: ¿una nueva era para Miami?

Una mirada al resurgir de los Marlins tras ganar series consecutivas, entre dramatismo extra inning y jóvenes promesas

Un giro inesperado en la temporada

Cuando hablamos de los Miami Marlins en esta temporada 2025, pocos habrían apostado a un equipo capaz de recomponerse rápidamente tras un arranque inconsistente. Sin embargo, el triunfo 8-5 sobre los San Francisco Giants del pasado miércoles marca un punto de inflexión: los Marlins han ganado series consecutivas por primera vez en el año. ¿Qué significa esto para la franquicia? ¿Es momento de dejar de verlos como simples comparsas del Este de la Nacional?

Diez entradas de drama y redención

El juego del 25 de junio en San Francisco fue todo lo que uno espera del béisbol veraniego: intensidad, sorpresas, decisiones polémicas y héroes inesperados.

Con el juego empatado 4-4 en el décimo inning, Otto López conectó un sencillo impulsor que puso a los Marlins arriba por 5-4. Pero no se detuvieron ahí. El prospecto Heriberto Hernández disparó un doble remolcador de dos carreras, y Connor Norby sumó una “sacrifice fly” que selló el rally de cuatro carreras. Una entrada perfecta desde el libro de estrategia ofensiva de cualquier mánager.

Sabíamos que este era nuestro momento para demostrar que no somos el mismo equipo de abril”, declaró Norby después del partido.

Calvin Faucher y la resiliencia del bullpen

En el noveno episodio, los fantasmas del pasado casi regresan. El taponero Calvin Faucher entró con ventaja 4-2, pero tras dos pelotazos y una base por bolas, cargó las bases. Willy Adames conectó un elevado de sacrificio y Patrick Bailey empató el juego con un sencillo. Pero una potente asistencia de Kyle Stowers desde los jardines acabó con Jung Hoo Lee en el plato, impidiendo que San Francisco tomara la delantera.

Fue una jugada definitoria. “Ese tiro de Stowers valió como un cuadrangular”, dijo el gerente general Peter Bendix. En un equipo donde el bullpen ha traído más dolores de cabeza que alivio, jugadas como esa cambian el ambiente completo del clubhouse.

López y Hernández: visión a futuro

Otto López, de 25 años, llegó a los Marlins sin tanto ruido, pero ha demostrado ser una pieza versátil y oportuna. Bateó de 4-2 con tres empujadas, incluyendo la de la ventaja. Por su parte, Heriberto Hernández, una de las promesas más seguidas del sistema de ligas menores del equipo, dejó claro su valor.

Fue el momento más importante de mi carrera”, comentó Hernández. Importante destacar que ya tiene una línea ofensiva de .321/.387/.569 entre AAA y MLB este año, algo que lo convierte en una joven sensación.

Webb y Cabrera: duelo de pitcheo con contrastes

Logan Webb, el as de los Giants, tiró seis sólidas entradas permitiendo solo dos carreras. Parecía tener la situación bajo control, pero la ofensiva de los Marlins finalmente carburó en el momento justo.

Edward Cabrera, por su parte, fue más que efectivo con 5⅓ innings y solo tres hits permitidos, aun cuando permitió el cuadrangular tempranero de Mike Yastrzemski.

Mi curva y cambio trabajaron muy bien hoy”, explicó Cabrera. El talento siempre ha estado ahí. Lo que necesita es consistencia.

¿Cambio de mentalidad en Miami?

Los Marlins se han caracterizado durante años por la mediocridad administrativa y deportiva. Desde su última aparición en playoffs en 2020, el equipo ha acumulado más titulares fuera del terreno (cambios de gerencia, cuestionadas decisiones de roster) que méritos deportivos.

No obstante, datos recientes sugieren una transformación invisible pero sólida:

  • Récord de 5-2 en juegos de una carrera en las últimas tres semanas
  • Promedio de .327 con corredores en posición de anotar desde junio
  • El bullpen ha bajado su ERA colectivo de 5.12 a 3.65 desde finales de mayo

Además, la gestión de Peter Bendix parece estar haciendo efecto silencioso: jóvenes con talento, rotación con lanzadores propios del sistema y un clubhouse más cohesionado.

Serie ganada: un símbolo

Ganar dos series consecutivas —y especialmente contra equipos como los Giants— no es solamente una estadística menor. Para equipos en desarrollo como los Marlins, simboliza identidad. Espíritu competitivo. El sabor de la esperanza.

Recordemos que Miami ni siquiera ha tenido temporadas consecutivas con marca ganadora desde 2003, cuando ganaron la Serie Mundial. Desde entonces, han sido sinónimo de reconstrucción perpetua.

¿Es esta vez diferente? Bendix piensa que sí: “No nos enfocamos en el calendario, miramos la cultura. Y esta empieza a tomar forma”.

El camino que viene

Los próximos partidos serán una verdadera prueba. Con enfrentamientos ante los Atlanta Braves y luego los St. Louis Cardinals, la consistencia será crucial. El abridor Janson Junk exhibe una ERA de 2.60 en sus últimas cuatro salidas, y parece haberse consolidado como elemento confiable.

De mostrar firmeza ante clubes de playoff, estos Marlins podrían convertirse desde ya en los underdogs peligrosos de la segunda mitad.

Reflexiones finales: ¿somos testigos de un renacimiento?

Es temprano aún, pero vale la pena ilusionarse. La combinación de jugadores jóvenes, el acierto en decisiones recientes del cuerpo técnico y la chispa emocional que produce una victoria en entradas extra puede hacer la diferencia cuando miremos atrás en septiembre.

Lo dijo Heriberto Hernández tras el partido: “No estamos aquí para aprender solamente. Venimos a ganar”.

Y eso ya es decir mucho para los eternamente ignorados Marlins.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press