¿Deporte, religión y apuestas? Así se está reconfigurando el estado conservador de Texas

La lucha por los Diez Mandamientos en las aulas, el muro fronterizo de Trump y la revolución legal de la lotería: Texas al filo de una nueva era política

Texas en la encrucijada: leyes, moral y millones de dólares

Texas atraviesa uno de los momentos políticos y sociales más turbulentos de su historia reciente. En medio de batallas legales encendidas por la invasión de principios religiosos en espacios públicos, reformas radicales en el sistema migratorio propuestas a nivel federal, e incluso un intento por reformular por completo el sistema de loterías del estado, el rostro de la política texana está cambiando con rapidez y polémica.

Los Diez Mandamientos en las aulas: ¿regreso al teocentrismo?

El gobernador republicano Greg Abbott firmó una ley que obliga a todas las escuelas públicas del estado a exhibir en sus aulas una copia de los Diez Mandamientos desde el 1 de septiembre. Según el texto legal, los carteles deberán tener un tamaño mínimo de 41 por 51 centímetros y mostrar una versión específica en inglés del texto bíblico.

La medida, celebrada por sectores conservadores, ha sido recibida con fuertes críticas por parte de una coalición diversa de líderes religiosos, incluyendo pastores cristianos progresistas y representantes de la Nación del Islam. Ellos argumentan que la decisión viola el principio constitucional de separación entre Iglesia y Estado.

De hecho, demandas han sido interpuestas en tribunales, citando la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos. “El gobierno debe gobernar; la iglesia debe ministrar. Cualquier otro escenario representa una amenaza al alma tanto de la democracia como de la fe”, señala uno de los textos de la demanda.

Un patrón nacional: ¿Texas sigue a la ultraderecha cristiana?

Texas no está solo en esta cruzada. Durante los últimos años, estados como Arkansas y Luisiana han promovido leyes similares —aunque han sido bloqueadas en tribunales federales. La insistencia en integrar principios religiosos a las aulas plantea la pregunta: ¿se está transformando el sistema educativo en una herramienta de adoctrinamiento político-religioso?

Según sondeos de Pew Research Center de 2023, Estados Unidos se aleja lentamente de la institucionalización religiosa; más del 29% de los estadounidenses adultos se identifican como “no afiliados” religiosamente. Esto choca con las legislaciones que buscan integrar prácticas religiosas en entornos públicos obligatorios.

Trump, su muro y $150 mil millones: el futuro migratorio en juego

Desde Washington, los ecos de la política migratoria de Donald Trump revitalizan la tensión entre estados como Texas y las instituciones federales. El proyecto presupuestario presentado por el expresidente, aún en debate en el Senado, contempla una inversión de $150 mil millones en seguridad fronteriza, deportaciones y expansión del muro entre EE. UU. y México a lo largo de los próximos cuatro años.

La Ley, apodada por el propio Trump como “One Big Beautiful Bill”, aumentaría exponencialmente el presupuesto anual de ICE (actualmente de $10 mil millones), reorganizando el sistema de ingreso legal a Estados Unidos al hacerlo más caro y restrictivo.

La narrativa se refuerza cuando se producen protestas como la vivida en Los Ángeles en junio pasado, tras redadas migratorias. Según el presidente de la Cámara, Mike Johnson: “La anarquía en LA es otra razón por la que debemos aprobar la ley de inmediato para proteger nuestras fronteras y familias”.

Migración vs. derechos humanos: una guerra económica y ética

Adam Isacson, experto en derechos humanos del Washington Office on Latin America (WOLA), ha alertado sobre la vaguedad del proyecto legal. Las partidas multimillonarias están desglosadas en frases ambiguas, lo que dificulta fiscalizar cómo se utilizarán los fondos. “No hay una especificidad real sobre el destino del presupuesto”, afirma.

La falta de claridad abre la puerta a construcciones masivas de centros de detención, crecimiento de la plantilla de ICE y la privatización de procesos migratorios, lo que representa una dirección clara hacia la criminalización de la migración.

La lotería de Texas: entre el escándalo y la supervivencia

Como si no fuera suficiente, otro drama se teje en paralelo: la transformación radical del sistema de Lotería en Texas. El senador Bob Hall presentó el proyecto de ley SB 3070, aprobado para garantizar la continuidad del juego hasta 2029, pero con nuevas reglas, incluyendo:

  • Prohibición de ventas por aplicaciones o por internet
  • Eliminación de la Comisión de Lotería de Texas
  • Transferencia de la administración de la lotería al Departamento de Licencias y Regulación (TDLR)
  • Limitar la compra de boletos a un máximo de 100 por persona en tiendas autorizadas

Según datos oficiales, la Lotería de Texas genera cerca de $2,000 millones anuales para fondos educativos. Suprimirla pondría en aprietos a la asignación presupuestaria estatal. “Necesitamos ese ingreso para equilibrar el presupuesto”, admitió Hall, a pesar de su oposición al azar patrocinado por el estado.

Una victoria millonaria que destapó el caos

La crisis fue desencadenada por una victoria sospechosa: un grupo adquirió el 99% de las 25.8 millones de combinaciones posibles y ganó un premio de $95 millones. La fragilidad del sistema se volvió evidente, exacerbada por el papel de los llamados “couriers”, aplicaciones que compran boletos físicos en tiendas y los venden en línea mediante escaneos.

La confusión se profundizó con el caso de Kristen Moriarty, ganadora de $83.5 millones que aún no ha recibido su premio porque compró su boleto a través de Jackpocket, un courier actualmente investigado.

“Fue emoción y felicidad al principio, pero luego se convirtió en estrés e ira”, declaró Moriarty. La investigación está en manos de los Texas Rangers, que también indagan el caso de los $95 millones.

Religión, control y moralidad pública: ¿hacia dónde se dirige Texas?

El paquete de reformas promovido por Texas refleja una tendencia clara: recentralizar poder, moral y regulación en manos del Estado desde una visión conservadora y religiosa.

Esto genera una presión directa sobre derechos civiles, libertad de culto y privacidad migratoria:

  • 📌 Escuelas públicas convertidas en espacios de doctrina religiosa obligatoria
  • 📌 Migrantes criminalizados a través de presupuestos milmillonarios sin claridad legal
  • 📌 Juegos de azar bajo lupa, pero preservados por necesidades presupuestarias

Mientras las instituciones educativas enfrentan la presión de adoptar símbolos religiosos, y las políticas migratorias federales dejan poco espacio a la interpretación humanitaria, el modelo de Texas se erige como un microcosmos ideológico: libertad religiosa para unos, imposición moral para otros.

Y el desenlace está lejos de resolverse. Si algo queda claro, es que Texas no está simplemente gobernando: está rediseñando su identidad cultural y política para las próximas décadas, con implicaciones que resuenan a nivel nacional.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press