Los White Sox y Marlins remontan con carácter: ¿Es demasiado tarde para sus aspiraciones?

White Sox: una bocanada de aire fresco en una temporada turbulenta

El domingo 22 de junio, los Chicago White Sox encontraron un respiro en una temporada plagada de derrotas. Miguel Vargas fue el héroe inesperado, conectando un doblete que rompió el empate en la octava entrada y permitió a su equipo vencer 4-2 a los Toronto Blue Jays. Esta victoria no solo cerró la serie a favor de Chicago, sino que también significó su primer triunfo en serie desde el 8 de junio.

Los White Sox habían perdido nueve de sus últimos diez encuentros, y la victoria del viernes por 7-1 solo sirvió como una chispa en medio de una oscuridad persistente. Pero el batazo de Vargas y las actuaciones sólidas de Brandon Eisert y Grant Taylor —quien logró su primer salvamento en las Mayores— parecen indicar que todavía queda algo de lucha en este plantel.

Una ofensiva a tiempo, un bullpen errático

Toronto se puso al frente 2-1 en la séptima entrada gracias a un sencillo productor de Bo Bichette. Pero el bullpen no pudo completar la tarea, con Brendon Little cargando con la derrota y Jeff Hoffman fallando su cuarta oportunidad de salvamento en 21 intentos.

El momento clave llegó cuando Hoffman entró con dos outs en la octava y corredores en primera y segunda. Caminó a Chase Meidroth, lo que llenó las bases, y luego cometió un error al tratar de fildear un rodado lento de Andrew Benintendi que permitió el empate. Entonces, apareció Vargas.

Con la presión al máximo, el joven venezolano encontró un lanzamiento medio y lo envió al jardín derecho para barrer las bases con dos carreras que sellaron la remontada.

¿Cuán significativo es este triunfo?

Los White Sox registran solo su segunda victoria en series como visitantes esta temporada (la primera ocurrió entre el 13 y 15 de mayo en Cincinnati). Las estadísticas son demoledoras, pero esta victoria da a los fanáticos una excusa para seguir creyendo. Con una marca general aún deficiente, las probabilidades de playoffs siguen siendo mínimas, pero en una liga que ha visto repuntes milagrosos (el caso 2011 de los St. Louis Cardinals es legendario), no se puede descartar nada.

Adrian Houser: buen regreso de la lista de paternidad

Otro punto positivo fue el desempeño del zurdo Adrian Houser, activado el mismo día del encuentro. Lanzó 6 1/3 episodios permitiendo dos carreras y siete hits. Fue una actuación sólida que permitió al bullpen trabajar con calma, logrando la combinación que finalmente cerró el encuentro triunfal.

Miami Marlins: una serie ganada a pulso ante los Braves

En el otro extremo del país, los Miami Marlins también celebraban. Derrotaron 5-3 a los Atlanta Braves con una actuación clave de Sandy Alcántara, quien lanzó seis entradas fuertes y obtuvo su cuarta victoria del año.

Alcántara, ganador del Cy Young de la Liga Nacional en 2022, ha vivido una campaña intermitente, pero el domingo demostró forma. Permitió tres carreras y seis hits, y logró mantener al peligroso lineup de Atlanta en control suficiente para que la ofensiva se hiciera cargo.

Kyle Stowers rompe el maleficio

El jardinero Kyle Stowers conectó su 11º jonrón de la temporada, el primero desde el 14 de mayo, cuando logró dos ante los Cubs. Con eso empató el partido a una carrera en la segunda entrada. Ese batazo cambió el ánimo en el dugout de Miami y dio pie para que la ofensiva se activara.

Además, Otto López y Xavier Edwards contribuyeron con múltiples imparables y carreras impulsadas. López produjo una en la tercera entrada, mientras que Edwards impulsó otra clave en el sexto episodio, cuando los Braves se acercaban peligrosamente.

El bullpen no falló

Otra buena noticia para Miami fue la actuación de su bullpen, algo que ha sido un as bajo la manga en esta temporada. Anthony Bender lanzó 1 2/3 entradas sin daños, Calvin Faucher cerró el octavo inning y Ronny Henriquez se adjudicó su segundo salvamento del año, mostrando temple y control en momentos de presión.

Los Marlins terminaron una difícil racha de 10 partidos ante rivales del Este de la Nacional con récord de 6-4. En total, tienen marca de 12-12 ante su división, lo cual es prometedor para un equipo que busca mantenerse competitivo rumbo al segundo tramo de la campaña.

¿En qué posición están realmente?

Los Marlins aún no tienen una posición privilegiada en la tabla general, pero su juego ante Braves —uno de los favoritos al título en la Nacional— confirma que el talento está ahí. Lo mismo se puede decir sobre Chicago: cuando se combinan pitcheo oportuno con batazos decisivos, suceden resultados como los del domingo.

La pregunta es si estos destellos de buen béisbol son síntomas de una mejoría genuina o simplemente momentos aislados de inspiración. En ambos casos, la consistencia ha sido el enemigo. Las siguientes series, tanto para Marlins (vs San Francisco) como para White Sox (vs Arizona), serán claves para determinar si se trata de un giro o de otro falso amanecer.

Jugadores para seguir

• Miguel Vargas (White Sox): El venezolano ha tenido oportunidades limitadas, pero su capacidad para responder en el clutch es algo que el cuerpo técnico deberá considerar para aumentar su tiempo de juego.
• Sandy Alcántara (Marlins): Si puede retomar regularmente la forma que lo hizo ganador del Cy Young, los Marlins podrían soñar con postemporada.
• Xavier Edwards (Marlins): Velocidad, visión de juego y contacto oportuno lo han hecho una revelación en el infield.

¿Qué sigue?

Chicago White Sox abrirán una nueva serie el lunes contra los Arizona Diamondbacks con Shane Smith (3-4, 2.85 ERA) programado para lanzar. Arizona colocará a Eduardo Rodríguez (2-4, 5.93 ERA) en la lomita.

Miami Marlins, por su parte, viajarán a San Francisco, donde abrirán una serie frente a los Giants. El encargado del montículo será Cal Quantrill (3-7, 5.68 ERA), buscando estabilizar la rotación que ha sido su punto débil.

En una temporada de extremos, este tipo de victorias pueden representar más de lo que parece. No solo son importantes en la tabla, sino también en el espíritu del vestidor.

Quizás para algunos sea tarde, pero para los White Sox y los Marlins, el mensaje es claro: no han dicho su última palabra.