El espectáculo de lo inesperado: Cal Raleigh y el renacimiento ofensivo de MLB
Mientras Jazz Chisholm Jr. se roba el show sin zapatos y Jarren Duran protagoniza una controversial expulsión, Cal Raleigh redefine el poder con su histórica racha jonronera
Por estos días, las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) están repletas de historias que combinan drama, espectáculo y un poco de caos. Desde jugadores que vuelan sin zapatos hasta récords históricos, el diamante nunca deja de sorprender.
Cal Raleigh: el bateador más temido del momento
En tiempos donde las estadísticas dictan el valor de los jugadores, Cal Raleigh se está encargando de llenar los titulares a fuerza de jonrones. El receptor de los Seattle Mariners no solo es la sensación del momento, sino que también está camino a superar marcas históricas para un bateador ambidiestro.
Con apenas 28 años, Raleigh ha mostrado lo que parece una temporada de ensueño. Tras su reciente actuación contra los Chicago Cubs, donde conectó cuatro jonrones en tres juegos, suma un total de 31 cuadrangulares en 2025, liderando en esa categoría en todas las Grandes Ligas.
Raleigh y un poder pocas veces visto
La hazaña de ser el primer bateador ambidiestro con al menos 30 jonrones antes del Juego de Estrellas lo coloca en una lista que no existía hasta ahora. Lo más impresionante es su consistencia: en los últimos 29 partidos, batea .327 con 16 jonrones y 34 impulsadas.
Su mánager, Dan Wilson, lo elogió diciendo:
“Treinta y un jonrones, simplemente sigue desafiando la historia... Es un jugador inteligente que no se desespera. Está exactamente donde necesita estar como bateador”.
Y no es solo el poder. En la victoria 14-6 ante los Cubs, Raleigh se embasó cuatro veces y anotó tres carreras. Más que un bateador de fuerza, está demostrando una completa madurez ofensiva.
¿Puede eclipsar a Ken Griffey Jr. antes del Juego de Estrellas?
Ken Griffey Jr. es un ícono del béisbol y, para muchos, el rostro más emblemático de los Mariners. Antes del receso del Juego de Estrellas, Griffey estableció el récord de jonrones con 35 en 1998. Raleigh está solo a cuatro jonrones de alcanzarlo.
Todo esto lo hace habiendo firmado un contrato de $105 millones por seis años, lo cual ya está comenzando a parecer un robo para Seattle si mantiene este nivel.
Como dijo Logan Gilbert, lanzador de los Mariners:
“Puede vencer de muchas formas. Parece que todos los partidos encuentra una manera de impactar”.
Jazz Chisholm Jr.: el ‘Shoeless Jazz’ de Nueva York
Mientras Raleigh arrasa con batazos, en el Bronx otro jugador se adueñó de los reflectores... con los pies descalzos. Jazz Chisholm Jr., jardinero central de los Yankees de Nueva York, protagonizó una de las jugadas más bizarras (y memorables) en años.
En el triunfo 4-2 de los Yankees sobre los Orioles, Chisholm perdió ambos zapatos mientras anotaba una carrera decisiva en el octavo inning. Con sus Jordan 1, talla 10½, completamente desprendidos, se deslizó hacia el plato, esquivando al receptor y tocando con la mano mientras caía.
“Estaba tan sudado. Los calcetines mojados. Todo simplemente se salió”, declaró entre risas luego del juego.
¿Apodo nuevo? Cuando se le sugirió llamarlo 'Shoeless Jazz', aludiendo a 'Shoeless' Joe Jackson, una figura ligada al escándalo del “Black Sox” de 1919, respondió sorprendido:
“¿Así consiguió su apodo? ¿Se le salieron sus zapatos?”
Y añadió con humor: “Entonces... ¿no llevaba zapatos?”.
Una actuación con aroma a redención
Más allá del espectáculo, el rendimiento de Chisholm está sorprendiendo. Tras perderse 28 partidos por un tirón en el oblicuo derecho, ha regresado encendido: bateando para .350 en sus últimos 60 turnos (21 hits) con 11 impulsadas.
Su carrera sin zapatos quedará para la historia visual, pero su aporte ofensivo fue determinante. En ese partido, además de las dos dobles, también fue protagonista en jugadas claves de anotación.
“Ese tipo tiene una energía única”, dijo Aaron Judge, capitán de los Yankees. “He visto cleats volar antes, pero no los dos. Eso fue increíble”.
Jarren Duran y la rabia contenida
No todas las historias de este fin de semana fueron festivas. En el juego entre Red Sox y Giants, Jarren Duran fue expulsado en la octava entrada tras discutir una jugada polémica.
Duran fue retirado en segunda base tras intentar convertir un sencillo en doble. Boston desafió la jugada, pero la revisión confirmó el out. Lo que siguió fue una escena caótica: insultos de Duran, expulsión inmediata y luego una confrontación casi física. Fue necesario que uno de los entrenadores evitara que llegara hasta el umpire Doug Eddings.
El mánager Alex Cora también fue expulsado minutos después, aumentando el caos para unos Medias Rojas que ya perdían 8-5 en el juego final de la serie.
¿Se están desmoronando los Red Sox?
El incidente de Duran simboliza la frustración interna de un equipo que ha mostrado inconsistencias. Su récord desde que empezó junio es mediocre, y las lesiones no han ayudado. Cora, a menudo pasional, se defendió diciendo que “defendía a sus jugadores”, pero la realidad es que el equipo parece desbalanceado emocionalmente en los momentos difíciles.
La naturaleza impredecible del béisbol
Si algo nos enseñó este fin de semana, es que el béisbol combina lo impredecible con lo legendario. En menos de 48 horas vimos todo esto:
- Un jonronero ambidiestro a pasos de superar a Ken Griffey Jr.
- Una carrera anotada sin zapatos que quedará grabada en la historia visual del juego.
- Una expulsión llena de furia e impotencia en un equipo que se desmorona.
Al final, la magia del béisbol es precisamente eso: la capacidad de sorprendernos con cada entrada y cada swing. Cal Raleigh podría ser el próximo gran ídolo de los Mariners. Jazz Chisholm, sin zapatos, nos recuerda que la alegría y espontaneidad nunca deben morir en el deporte. Y los Red Sox, bueno... tienen mucho que reflexionar.
Como dijo Giancarlo Stanton a Chisholm tras su increíble carrera:
“Sigue jugando así. No los necesitas (los zapatos)”.