Jenny Boucek y el Juego 7: más que una final, un momento histórico para las mujeres en la NBA

La asistente de los Pacers está a un paso de romper barreras históricas y convertirse en la primera mujer entrenadora de primera fila en ganar un título de la NBA

Una final con historia

Este domingo por la noche, la NBA presenciará algo más que el cierre de las Finales con un Juego 7 entre los Indiana Pacers y los Oklahoma City Thunder. Habrá mucho más en juego que un trofeo: la historia está al borde de ser escrita por Jenny Boucek, quien podría convertirse en la primera asistente principal de primera fila en ganar un campeonato de la NBA.

Boucek, exjugadora de la WNBA y pionera en el ámbito técnico, es una de las voces más influyentes en el banco de los Pacers, especialmente al liderar el esquema defensivo del equipo. Más allá del aspecto técnico, su presencia significa un antes y un después hacia una mayor inclusión femenina en los niveles más altos del baloncesto profesional masculino.

Un camino no exento de obstáculos

Jenny no ignora el significado de este paso. “He estado el tiempo suficiente como para saber que los mismos que te elogian, luego te critican. He aprendido a silenciar todo eso y enfocarme solo en lo que puedo controlar”, comenta la entrenadora de manera reflexiva.

Ese enfoque ha sido forjado a lo largo de una carrera dedicada al baloncesto. Fue parte del cuerpo técnico en la WNBA, donde junto a Sue Bird y Lauren Jackson ayudó a los Seattle Storm a alzar el título en 2004 con un staff exclusivamente femenino. Sin embargo, para Boucek, aquel hito pasó inadvertido: “Era joven e ingenua; no entendí el impacto que eso tenía”. Con los años, sin embargo, comprendió la magnitud histórica de aquel momento.

Credibilidad ganada desde el conocimiento

Ron Rothstein, el primer entrenador de la historia de los Miami Heat y exentrenador del efímero Miami Sol, fue quien le confió una plaza como colaboradora durante los primeros compases de su carrera técnica. Luego llegó Rick Carlisle, actual entrenador de Indiana Pacers y conocido por su meticulosa preparación, quien no dudó en incluir a Boucek como asistente cuando asumió la dirección del equipo.

“Desde el primer momento supe que Jenny era una gran candidata, no sólo para ser entrenadora asistente en la NBA, sino para llegar incluso a dirigir un equipo de forma permanente”, dijo Carlisle.

Un rol muy activo en los Pacers

El trabajo técnico de Boucek no es decorativo. Está encargada de liderar la defensa del equipo y tener un contacto directo en la planificación de juegos. Es probablemente, después de Carlisle, la voz de mayor impacto durante los tiempos muertos.

Además, ha tenido un papel clave con jugadores puntuales como Pascal Siakam, quien llegó a mediados de temporada desde Toronto y debió aprender rápidamente el sistema. “Ella fue mi guía en ese proceso. Es clara, energética y siempre positiva. Eso es fundamental en momentos tensos”, confesó el propio Siakam.

Una liga que comienza a abrir sus puertas

La posible victoria de Indiana no solo secaría la sequía de títulos desde la época de los Pacers de Reggie Miller, sino que también se convertiría en un símbolo potente sobre la evolución de los espacios de liderazgo femenino en la NBA. Si bien hubo mujeres en roles técnicos—Becky Hammon, por ejemplo, fue asistente principal de Gregg Popovich en San Antonio—Boucek representa el primer caso de una mujer en primera fila peleando por coronarse campeona dentro del staff técnico.

Históricamente, la NBA ha sido un coto masculino en casi todos los niveles de gestión y técnica. Según un informe de TIDES (The Institute for Diversity and Ethics in Sport), hasta 2023 menos del 10% de los entrenadores asistentes eran mujeres. A pesar de los avances en la diversidad racial en los banquillos, la paridad de género sigue rezagada.

Más que cifras: un ejemplo a seguir

Ser asistente técnica implica largas jornadas de análisis, reuniones, scouting y apoyo emocional. Y en eso, Boucek sobresale. “Pensar que he llegado hasta aquí simplemente por cumplir una cuota de inclusión no tiene ningún sentido. Estoy aquí porque me lo he ganado”, dijo en una reciente rueda de prensa.

Su ejemplo no sólo abre camino para futuras generaciones de mujeres entrenadoras, también deja claro que el talento no tiene género. Boucek busca que otras puedan verse reflejadas en su camino, tal y como muchas jóvenes lo hicieron con ella tras aquel título en la WNBA de 2004.

Unos Pacers transformados

Con un proyecto joven y liderado por estrellas emergentes —como Tyrese Haliburton y la reciente incorporación de Siakam— los Pacers han llegado mucho más lejos de lo esperado. Competir codo a codo contra Oklahoma City, otro equipo joven y vibrante, ha producido una de las finales más igualadas de la última década.

En medio de ese entorno, Jenny Boucek ha sido el ancla emocional y táctica.

El valor simbólico de una victoria

Como ella misma explica, su deseo actual va más allá de la historia. “Yo sólo quiero ganar un campeonato. Ser parte del equipo. Aportar desde donde me toca”, dice Boucek. Pero el valor simbólico de su victoria —si Indiana lo consigue— será imposible de ignorar.

Las barreras históricas no desaparecen con comunicados, sino con momentos concretos. Este domingo puede ser uno de esos momentos que abre puertas, que empuja paradigmas, que hace que ese Juego 7 ante los Thunder vaya mucho más allá del marcador.

Una mujer, en el calor de la lucha técnica, en el corazón de una final. Porque Jenny Boucek no está aquí para ser parte de la historia. Está aquí para seguir haciéndola.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press