Tampa Bay Sun hace historia: el nacimiento de un nuevo gigante del fútbol femenino en EE.UU.

Con un gol de Cecilie Fløe en tiempo extra, el equipo floridano se corona campeón inaugural de la USL Super League, encendiendo el debate sobre el futuro del fútbol profesional femenino en Estados Unidos.

Un nuevo sol brilla en el fútbol femenino

La ciudad de Tampa vive un momento histórico en su historia deportiva. La noche del sábado, frente a un lleno total en el Riverfront Stadium, el Tampa Bay Sun alzó el trofeo de la USL Women’s Super League, venciendo por 1-0 a Fort Lauderdale United gracias a un gol agónico de la internacional danesa Cecilie Fløe en el minuto 100 del tiempo extra.

Este campeonato no fue solo la primera conquista para el equipo del estado del sol, sino también el cierre exitoso de la temporada inaugural de una liga que aspira a cambiar significativamente el panorama del fútbol femenino profesional en Estados Unidos.

La jugada que cambió la historia

La autora del gol, Fløe, anotó su duodécimo tanto de la temporada tras una jugada creada por Sydny Nasello, quien desbordó por la línea de fondo con gran confianza. Su pase preciso permitió que Fløe atacara el espacio entre dos defensoras, definiendo con calma para desatar la euforia de una fanaticada que había esperado durante mucho tiempo un momento como este.

Sabíamos que este era nuestro año. Lo sentíamos con cada partido, con cada entrenamiento. Esto es especial.”, declaró Fløe tras el pitido final.

Una liga con una propuesta ambiciosa

La USL Women’s Super League se presentó esta temporada como la liguera hermana de más alto nivel en el fútbol femenino estadounidense, posicionándose al lado de la más consolidada National Women's Soccer League (NWSL). Pero mientras la NWSL sigue un calendario convencional de primavera a otoño, la USL se alinea con el formato europeo (otoño a primavera), una jugada estratégica para facilitar cruces internacionales y mantener el interés del público fuera del típico verano deportivo estadounidense.

Esta temporada inaugural estuvo compuesta por ocho equipos, con uno más listo para unirse en la próxima campaña. Entre sus aspiraciones, destaca la intención de convertirse en un semillero de talento y una alternativa sostenible para jugadoras que buscan minutos en ligas de alto nivel.

Los protagonistas de la gran final

El Tampa Bay Sun no fue el favorito desde el inicio, pero sí fue consistente. Con un récord de 13 victorias, 6 empates y 10 derrotas, el conjunto floridano llegó a los playoffs en buena forma. En las semifinales, eliminaron al Dallas Trinity por 2-1, mientras que Fort Lauderdale protagonizó una gran sorpresa al derrotar al mejor equipo de la fase regular, North Carolina Ascent, por el mismo marcador.

Fort Lauderdale United –con marca de 11-9-9– tuvo opciones, pero el orden defensivo de Tampa y una destacada actuación de la arquera Katie Lund impidieron el empate. Nasello y Fløe fueron las figuras más destacadas, mostrando que el talento joven puede tomar protagonismo en partidos de alta tensión.

¿Una amenaza para la NWSL?

Aunque aún incipiente, la aparición de la USL Super League puede representar un cambio de paradigma. Su crecimiento puede aumentar la presión sobre la NWSL, obligándola a mejorar condiciones, expandirse o repensar aspectos de su modelo funcional. Si bien la NWSL ha dado pasos importantes –como acuerdos colectivos y expansión internacional– no puede ignorarse que una liga paralela que ofrece minutos reales y mejor exposición a jóvenes talentos puede captar atención, sponsors y audiencia.

En palabras de Angela Hucles, presidenta de la USL Super League: “No estamos aquí para competir contra nadie. Estamos aquí para expandir el fútbol femenino y dar más herramientas a nuestras jugadoras.” Sin embargo, el éxito de Tampa Bay Sun y la recepción del público indican que la competencia ya empezó, al menos en el corazón de los aficionados.

Modelo europeo, pero ¿funcionará en EE.UU.?

El hecho de que la USL Super League juegue de otoño a primavera es una de sus mayores apuestas. Este formato está alineado con el calendario FIFA y con las grandes ligas europeas como la FA Women’s Super League (Inglaterra), Liga F (España) o la Division 1 Féminine (Francia).

Esto ofrece ventajas logísticas para préstamos o traspasos internacionales, y se abre la puerta a realizar amistosos en ventanas estratégicas. Sin embargo, puede generar dificultades con el clima en muchas regiones del país durante el invierno, así como la competencia con la NFL, la NBA y la NHL en la temporada alta de deportes estadounidenses.

Crecimiento regional y oportunidades

El surgimiento de equipos como Tampa Bay Sun también representa un nuevo espacio regional para el desarrollo del fútbol. Florida, que ya cuenta con presencia en la MLS y NWSL a través del Orlando City y Orlando Pride, tiene ahora un nuevo epicentro de atención gracias a este título.

Además, este equipo ha comenzado a construir una base de aficionados desde cero. La venta total de las entradas en la final es prueba de que el público responde cuando se ofrece un producto competitivo. En solo un año, pasaron de ser un proyecto nuevo a una franquicia campeona que puede servir de ejemplo para otros mercados.

Jugadoras a seguir

Más allá de Nasello y Fløe, quienes ahora serán observadas por equipos en ligas mayores, otras jugadoras como Taylor Malham, defensora central fuerte y líder desde el fondo, y Michaela Abam, volante ofensiva de nacionalidad camerunesa, también dejaron una gran impresión a lo largo del torneo.

Mientras tanto, Fort Lauderdale United también tiene sus joyas. Se espera que jugadoras como Emily Madril y Jazmin Ryan reciban ofertas para dar el salto a la NWSL o incluso a clubes europeos.

Impacto en el panorama internacional

El fútbol femenino vive un momento de efervescencia global. Estados Unidos, tradicional potencia, ha visto cómo otras naciones cierran la brecha. Con selecciones como Inglaterra, España y Francia creciendo año tras año, las jugadoras estadounidenses ya no tienen asegurado su dominio internacional.

En este panorama, ligas como la USL Super League pueden ser cruciales para mantener un flujo constante de jugadoras que se desarrollan en velocidad, táctica y roce competitivo. Si se logra consolidar este modelo, incluso podría formar parte de traspasos internacionales más frecuentes o torneos de tipo interligas con Europa o Sudamérica.

Lo que se viene

La USL ha confirmado que un noveno equipo se integrará a la liga en la próxima temporada. A pesar de que no se ha anunciado oficialmente cuál será la nueva franquicia, los rumores apuntan a una entrada en el oeste del país, posiblemente en California o Nuevo México, zonas de fuerte interés deportivo.

Se espera también una mejora en la infraestructura, un mejor acuerdo televisivo y mayor visibilidad mediática. Con una final tan intensa y una base de jugadores de calidad, es solo cuestión de tiempo para que la liga dé el siguiente paso.

En palabras del comisionado adjunto, “El primer capítulo fue épico, pero la historia apenas comienza”.

¿El nacimiento de una nueva dinastía?

Con jugadoras de talla internacional y un cuerpo técnico bien estructurado, Tampa Bay Sun ya se perfila como el equipo a vencer para la próxima temporada. Su manera de jugar, su base joven y su conexión con la ciudad lo posicionan como un club con proyección no solo deportiva, sino también social y comercial.

El fútbol femenino estadounidense tiene una nueva estrella en el firmamento. Y si bien aún falta mucho camino por recorrer, la USL Super League ya cumple con su primera promesa: ofrecer más oportunidades, más espectáculo, y más razones para creer que el fútbol también se escribe con "ellas".

Este artículo fue redactado con información de Associated Press