Arsenal revoluciona la Superliga femenina: todos los partidos en el Emirates Stadium
El conjunto londinense apuesta por el fútbol femenino de alto nivel en su estadio principal tras conquistar la Champions League
En una jugada histórica llena de simbolismo y ambición, el Arsenal anunció que todos sus partidos como local en la Superliga Femenina (Women’s Super League) la próxima temporada se jugarán en el Emirates Stadium, el estadio principal del club con una capacidad para 60,000 espectadores.
Una temporada que marca un antes y un después
Durante la temporada actual, el Arsenal ya probó esta estrategia con resultados impresionantes. De los 11 partidos que disputó como local en la Superliga femenina, nueve se celebraron en el Emirates, incluyendo un derbi ante el Tottenham que atrajo a casi 57,000 espectadores. Solo dos encuentros se mantuvieron en el Meadow Park de Borehamwood, estadio de capacidad mucho menor, con apenas 4,000 asientos.
“Found a place where we belong” (Encontramos el lugar al que pertenecemos), fue el emotivo mensaje que publicó el club en sus redes sociales, celebrando esta iniciativa que posiciona al equipo femenino en un lugar destacado dentro de la infraestructura de uno de los clubes más tradicionales de Inglaterra.
Apoyo masivo de la afición
El respaldo del público ha sido clave en esta decisión. En la presente campaña, el partido ante el Chelsea tuvo una asistencia superior a los 45,000 fanáticos, y el último juego de la temporada, frente al Manchester United, superó los 46,000. Estas cifras convierten al Arsenal femenino en un verdadero fenómeno de atracción de multitudes, especialmente frente a clubes rivales de alto perfil.
Impacto europeo: de la gloria continental al impulso doméstico
El anuncio llega tras una temporada memorable en la que el Arsenal, subcampeón en la liga doméstica detrás del Chelsea, sorprendió al continente derrotando a un Barcelona ampliamente favorito para ganar la Champions League Femenina.
Con ese título europeo en el bolsillo, el club apuesta ahora por consolidar su proyecto deportivo alrededor del Emirates, generando nuevos ingresos, alianzas y una experiencia inigualable para los aficionados.
Champions League y partidos de copa: el único "pero"
A pesar de esta histórica decisión, el club confirmó que los partidos de la fase de grupos de la Champions League y las eliminatorias locales de copa seguirán disputándose en Borehamwood. La razón es estratégica: estos juegos, en sus fases iniciales, suelen tener una asistencia significativamente menor. De hecho, en ediciones pasadas, las fases preliminares apenas reunieron menos de 10,000 espectadores.
Además, el nuevo formato de la Champions —una liga de 18 equipos en la fase inicial— requerirá una cierta flexibilidad con respecto a la planificación de sedes. Sin embargo, el Arsenal sostiene que los partidos de instancias decisivas de la Champions volverán al Emirates, buscando darles a sus jugadoras y fanáticos una experiencia a la altura del torneo.
Un paso alineado con el crecimiento global del fútbol femenino
La iniciativa de Arsenal se alinea perfectamente con el crecimiento mundial del fútbol femenino. Según datos recientes de la FIFA, la asistencia a torneos femeninos ha crecido exponencialmente en los últimos cinco años. El Mundial Femenino de 2023 en Australia y Nueva Zelanda rompió récords de asistencia y audiencia, con más de 1.9 millones de espectadores en los estadios y cientos de millones viendo los partidos en televisión y plataformas digitales.
Inglaterra ha estado a la vanguardia en este fenómeno. La final de la Eurocopa Femenina 2022, celebrada en Wembley y ganada por las Lionesses frente a Alemania, atrajo a 87,192 espectadores, la mayor cantidad para cualquier partido de la Euro, masculina o femenina.
En este contexto, los equipos líderes como Arsenal, Chelsea o Manchester United comienzan a comprender que invertir en el fútbol femenino no solo responde a un principio de equidad, sino también a una tendencia comercial sostenible.
Arsenal: un club pionero
El conjunto del norte de Londres ha sido históricamente una institución pionera en la promoción del fútbol femenino. Las Gunners han ganado 15 títulos de liga, 14 FA Cups y múltiples Copas de la Liga, siendo el club más laureado de Inglaterra.
Además, fueron el primer equipo inglés en ganar la Champions femenina en 2007. Ahora, con esta nueva conquista europea, se consolidan como referencia continental. Jugar permanentemente en el Emirates representa un paso lógico y ambicioso.
La entrenadora del equipo, Jonas Eidevall, declaró recientemente: “Este equipo pertenece a los escenarios más grandes. Lo hemos demostrado no solo por nuestras victorias, sino por cómo conectamos con la afición”.
Modelos a seguir: ¿seguirán otros clubes este ejemplo?
La gran pregunta es si otros clubes en Inglaterra y Europa se animarán a replicar esta apuesta integral. Hasta ahora, muchos equipos reservan sus estadios principales solo para partidos destacados o compromisos europeos.
El Chelsea juega la mayor parte de sus partidos femeninos en el estadio de Kingsmeadow (capacidad: 4,850), mientras que el Manchester United alterna partidos entre Leigh Sports Village y ocasionalmente Old Trafford. Lo mismo ocurre en Francia, Alemania e Italia.
Sin embargo, si el Arsenal demuestra que llenar el Emirates se puede convertir en la norma, y no en la excepción, sentará las bases para una nueva era en la gestión del fútbol femenino profesional.
Un estadio transformador
El Emirates Stadium, inaugurado en 2006, ha sido testigo de triunfos, reconstrucciones y etapas de transición en el equipo masculino. Ahora, suma una nueva identidad como el hogar permanente del equipo femenino.
Además de la evidente mejora operativa y de imagen, jugar en el Emirates contribuirá a aumentar los ingresos por matchday y fortalecer el posicionamiento del club como marca global orientada hacia la igualdad e innovación.
Paralelamente, se activarán más espacios para la venta de mercancía oficial del equipo femenino, promociones conjuntas e incentivos familiares para atraer a nuevas generaciones de aficionados.
Hacia un futuro más inclusivo
La decisión del Arsenal no es solo deportiva. Se trata de un mensaje institucional con un fuerte contenido simbólico: el club no ve al equipo femenino como una estructura paralela, sino como parte integrada y prioritaria del proyecto global.
Y eso, en tiempos modernos donde la igualdad de género en el deporte aún enfrenta múltiples rezagos en diversas partes del mundo, es una declaración poderosa.
La próxima temporada de la Superliga podría ser histórica no solo por el nivel de competencia, sino porque un equipo tradicional inicia un camino ambicioso que podría inspirar revoluciones similares en toda Europa.
En definitiva, el Arsenal ha encontrado no solo un estadio donde jugar, sino un hogar donde crecer.