Moise Kean y la nueva ola de lesiones que golpea a la selección italiana

El delantero de la Fiorentina se suma a la creciente lista de bajas en Italia antes del inicio de las eliminatorias al Mundial 2026, encendiendo las alarmas en una Azzurra obligada a reaccionar

Moise Kean, delantero estrella de la Fiorentina, ha sido la última víctima de una preocupante serie de lesiones que afectan a la selección italiana de fútbol. A tan solo días del inicio de las eliminatorias para el Mundial 2026, el combinado dirigido por Luciano Spalletti sufre una oleada de bajas que pone en jaque su rendimiento competitivo frente a rivales como Noruega y Moldavia.

Kean, la gran baja ofensiva

Tras una temporada consagratoria en la Fiorentina, donde anotó 25 goles en todas las competiciones —19 de ellos en la Serie A—, Moise Kean estaba llamado a liderar la ofensiva italiana en estas primeras fechas. Sin embargo, una lesión muscular detectada durante una sesión de entrenamiento provocó su inmediata desconvocatoria. El jugador regresó de inmediato a su club para ser evaluado y continuar su recuperación.

El golpe no solo llega en el plano físico, sino también en el emocional. Kean se encontraba en un momento clave de su carrera, consolidado como una pieza ofensiva fundamental para Italia, y autor de siete goles en 21 partidos con la selección. Uno de sus actuaciones más emblemáticas se dio en marzo de este año, cuando anotó dos tantos en el empate 3-3 ante Alemania, remontando un 3-0 adverso.

Un equipo que se desmorona

Además de Kean, otras bajas han debilitado al equipo italiano en apenas una semana. Alessandro Buongiorno y Mattia Gabbia, ambos defensores, abandonaron también la concentración por problemas físicos. Gabbia fue sustituido por Daniele Rugani, mientras que la baja de Buongiorno agravó la situación defensiva del combinado nacional. Asimismo, Francesco Acerbi declinó su convocatoria sin precisar motivos, lo que generó aún más incertidumbre.

Este cúmulo de ausencias afecta tanto a la defensa como al ataque, dejando al seleccionador nacional con opciones limitadas para una jornada doble crucial.

Un arranque complicado en el Grupo

Italia debutará en estas eliminatorias enfrentando a una Noruega comandada por el letal Erling Haaland. Los escandinavos llegan exultantes con 6 puntos y una diferencia de gol de +7, producto de sendas victorias: 5-0 ante Moldavia y 4-2 frente a Israel. El equipo azzurro, por su parte, aún no ha disputado su primer partido, pero ya está en desventaja en la tabla.

El segundo duelo será contra Moldavia en cuatro días, un partido sobre el papel accesible, pero que ahora se torna exigente debido al contexto de lesionados y a la necesidad imperante de sumar puntos.

Una mirada al presente de Kean

Pocas temporadas han sido tan importantes para el delantero formado en la Juventus como la que vivió en la Fiorentina durante el 2024-25. Desde su llegada, Kean cambió su imagen: consolidó su capacidad goleadora, trabajó en su disciplina táctica y se ganó la confianza del cuerpo técnico. Sus 25 goles lo colocaron como el segundo máximo goleador italiano de la Serie A, solo superado por Mateo Retegui (Atalanta), con 21 anotaciones.

Esta situación representa un duro revés para un jugador que aspiraba incluso a portar la camiseta número 9 como referente del nuevo ciclo bajo el mando de Spalletti.

Italia necesita reinventarse

Luciano Spalletti, quien asumió la dirección técnica tras la sorpresiva eliminación de Italia ante Macedonia del Norte en la pasada clasificación al Mundial 2022, tiene ahora un desafío de peso: conformar un once competitivo sin tres de sus jugadores clave. El DT, conocido por su libreto táctico ofensivo y adaptable, buscará reorganizar su esquema probablemente con jugadores del medio local como Giacomo Raspadori o Matteo Politano, aunque ninguno ofrece el mismo peso en el área que Kean.

Lesiones que preocupan globalmente

Lo sucedido con Italia no es un caso aislado. Las selecciones de élite cada vez enfrentan más problemas vinculados a lesiones antes y durante competiciones oficiales. La cercana Copa de Oro de la CONCACAF también ha dejado lesionados, como el portero estadounidense Zack Steffen, afectado en la rodilla durante un entrenamiento y confirmado como baja.

El aumento en la carga de partidos en clubes y selecciones ha sido objeto de crítica constante por parte de entrenadores y preparadores. “Estamos llevando a los jugadores al límite físico”, afirmó recientemente el técnico alemán Julian Nagelsmann. Y sobre Italia, no faltan los que sugieren que la falta de una adecuada gestión médica y de tiempos de descanso puede estar detrás de esta plaga de lesiones.

¿Quién reemplazará a Kean?

La pregunta que se repite en la prensa deportiva italiana es clara: ¿quién tomará el puesto del goleador? Aunque no hay una confirmación oficial, se especula con alternativas como:

  • Giacomo Raspadori: versátil, rápido, con experiencia europea.
  • Wilfried Gnonto: joven promesa, con desborde y mentalidad ofensiva.
  • Lorenzo Colombo: menos probado, pero con un físico y juego de área similares al de Kean.

Aunque todos tienen talento, la baja de Kean deja un hueco notorio, tanto por efectividad como por su rol dentro del esquema táctico.

Spalletti en modo estratega

Conocido por su capacidad para sacar el máximo de planteles reducidos —como lo hizo con el Napoli y su título de Serie A en 2023—, Luciano Spalletti tendrá que aplicar toda su sapiencia para no dejar puntos en el camino desde el arranque. La apuesta será mantener la columna vertebral con jugadores como Barella, Donnarumma, Di Lorenzo y Jorginho, y buscar alternativas dinámicas para la punta del ataque.

“Cada obstáculo es una oportunidad para demostrar qué clase de selección queremos ser”, declaró el técnico. La frase suena casi como un mantra que necesitará repetirse tanto en el vestuario como fuera de él.

Italia y el peso de la historia

Cuatro veces campeona del mundo, la selección italiana arrastra una deuda histórica reciente: dos ausencias consecutivas en Copas Mundiales (2018 y 2022). Con un grupo de jóvenes talentos emergentes y nuevos liderazgos, el camino a 2026 es no solo un reto, sino una responsabilidad nacional.

El pueblo italiano, todavía con la herida abierta de misas clasificaciones pasadas, desea ver una azzurra que brille nuevamente. Pero sin Kean, con defensas tocadas y un calendario que no da tregua, el margen de error es prácticamente inexistente.

La noche del viernes ante Noruega será más que un simple partido: será una prueba de carácter, profundidad y, sobre todo, resiliencia.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press