Lesiones, promesas y movimientos clave: el drama actual del béisbol en la MLB
Corbin Burnes, Ronny Mauricio y Luke Weaver protagonizan una semana de decisiones importantes en Diamondbacks, Mets y Yankees
Una semana llena de giros inesperados, decisiones urgentes y esperanzas renovadas en la MLB ha encendido la conversación entre los fanáticos del béisbol. Tres equipos —Arizona Diamondbacks, New York Mets y New York Yankees— están lidiando con lesiones importantes y movimientos de plantilla que podrían tener consecuencias en sus aspiraciones para la temporada 2025.
Corbin Burnes y la fragilidad de un as
Cuando los Arizona Diamondbacks firmaron a Corbin Burnes por seis años y $210 millones, sabían que se hacían con uno de los brazos más consistentes de las últimas temporadas. Ganador del Cy Young de la Liga Nacional en 2021 con los Milwaukee Brewers, Burnes había sido sinónimo de durabilidad: al menos 28 aperturas en cada temporada desde esa proeza.
Pero el 1 de junio de 2025, durante un sólido desempeño contra los Washington Nationals, la narrativa cambió abruptamente. En medio de la quinta entrada, con dos outs y tras permitir un sencillo a CJ Abrams, el derecho gesticuló al dugout con evidente molestia. Arizona ganaba 3-0, y la salida prematura encendió las alarmas. Ahora, Burnes está en la lista de lesionados de 15 días por inflamación en el codo derecho.
Hasta ese momento, su campaña era brillante: 3-2, 2.66 ERA, 6 ponches en 4 2/3 entradas frente a los Nationals. Su ausencia pone en jaque a una rotación que busca estabilidad. Su reemplazo, Tommy Henry, ha lanzado apenas 2 2/3 entradas sin permitir carreras esta temporada. ¿Podrá llenar los zapatos de Burnes?
Ronny Mauricio: resurgiendo de las cenizas
En Nueva York, otro nombre genera mucho ruido: Ronny Mauricio. Considerado durante años como uno de los top 100 prospectos de toda la MLB, el dominicano tuvo un debut promisorio en 2023 con los Mets: .248 de promedio, 2 HRs, 9 RBIs y 7 bases robadas en 26 juegos. Pero una lesión de ligamento cruzado anterior jugando béisbol invernal en su natal República Dominicana amenazó con frenar su ascenso.
Después de meses de recuperación y reapariciones en ligas menores (nivel A, AA y finalmente AAA con Syracuse), Mauricio ha regresado BIG. En sus últimos 9 juegos en Triple-A Syracuse, ha bateado .515 con 3 cuadrangulares, 8 carreras impulsadas y una asombrosa OPS de 1.382. Números que podrían sugerir que está más que listo para el siguiente paso.
La lesión de Mark Vientos, quien se tocó la corva tras una jugada en la décima entrada contra los Dodgers, ha precipitado la llamada. Mauricio, un shortstop natural, ha demostrado versatilidad: en 2023 disputó 21 partidos en la segunda base y cinco en tercera. Será clave ver cómo los Mets manejan su inclusión, especialmente siendo un equipo que actualmente lidera su división.
Luke Weaver y el efecto dominó en el bullpen de los Yankees
Del otro lado del Bronx, los Yankees también viven una reestructuración inesperada —esta vez en el bullpen. Luke Weaver, llamado a ser el nuevo cerrador tras lesiones y altibajos de otros brazos, se lesionó mientras calentaba en el Dodger Stadium el pasado fin de semana. El diagnóstico: distensión del tendón de la corva izquierda.
Weaver había brillado: 1.05 ERA, 8 salvamentos en 9 oportunidades. Una presencia confiable para cerrar los encuentros. Pero su fragilidad física obliga a los Yankees a mirar hacia otro rostro familiar: Devin Williams. Aunque había perdido el puesto de cerrador en abril tras un ERA de 11.25 en sus primeros 10 juegos, ahora se espera que retome esas funciones. Actualmente tiene ERA de 6.23 en 25 presentaciones y 5 salvamentos de 6 intentos.
Los movimientos no terminan allí. En las últimas 72 horas, los Yankees también:
- Activaron al infielder Jazz Chisholm Jr., quien se perdió 28 juegos por una lesión de oblicuo.
- Activaron al derecho Fernando Cruz.
- Llamaron al derecho Yerry de los Santos desde Triple-A.
- Optionaron al infielder Jorbit Vivas.
- Diseñaron para asignación al veterano Carlos Carrasco.
Una metamorfosis táctica en toda regla. Además, DJ LeMahieu se mantiene en la segunda base tras regresar de una distensión de pantorrilla y está empezando a recobrar ritmo ofensivo (.239 AVG con su primer juego de 4 hits desde 2021).
Una carrera sostenida por profundidad de plantilla
Lo que tienen en común Diamondbacks, Mets y Yankees es claro: todos apuestan por la profundidad para mantener sus aspiraciones a flote. En un calendario de 162 partidos y con la exigencia física que el béisbol moderno impone, las lesiones ya no son excepciones, sino parte del guion. La labor de oficinas, managers y cuerpos técnicos está en saber adaptarse.
Equipos como los Yankees han sido modelo de esto. En 2022 y 2023, sufrieron 30+ movimientos a la IL cada temporada, y sin embargo, lograron mantener competividad. Lo mismo ocurre ahora con los Mets, quienes aún con piezas fuera por larga duración (como Edwin Díaz, Francisco Álvarez y Starling Marte en distintos momentos), siguen respondiendo gracias al aporte de jugadores como Brett Baty, J.D. Martinez o Harrison Bader.
El dilema médico-táctico: ¿descanso o riesgo?
La inflamación de codo de Burnes, la lesión muscular de Weaver y la recuperación ligamentaria de Mauricio reflejan diferentes tipos de escenarios médicos. Cada uno requiere decisiones claves: descansar o forzar, reinsertarse progresivamente o probar de inmediato en MLB. Estas decisiones no solo impactan en la victoria diaria, sino también en la carrera profesional de los atletas a largo plazo.
“No todos los días tendrás a tus estrellas disponibles. Lo crucial es cómo manejas el siguiente hombre en la fila”, dijo Aaron Boone, manager de los Yankees, tras los movimientos recientes.
En ese contexto, jugadores como Tommy Henry, Devin Williams y el mismo Mauricio representan algo más que cifras: son símbolo de esperanza. El talento joven y el liderazgo experimentado tendrán que mezclarse durante una etapa donde las lesiones ya están marcando el ritmo de la temporada 2025.
¿Quién dará el siguiente gran paso?
Mientras es incierto cuánto tiempo estará fuera Burnes, los Mets podrían haber encontrado otra joya en Mauricio y los Yankees dependerán (nuevamente) del guante y bate de Chisholm Jr., además de una rotación más joven. Estas semanas podrían ser decisivas para definir el destino de la Liga Nacional Este y la Americana.
La historia del béisbol sigue demostrando una constante: las temporadas no se ganan solo con superestrellas, sino con resiliencia, planificación e improvisación estratégica.