Ucrania bajo fuego: el rostro cambiante de una guerra de drones y diplomacia estancada
Mientras Kiev y Moscú alistan nuevas conversaciones de paz, los bombardeos y ataques con drones marcan un nuevo y oscuro capítulo del conflicto
La guerra que no cesa: Ucrania entre misiles, drones y negociaciones
El conflicto entre Rusia y Ucrania ha marcado un nuevo hito en su tercera primavera sangrienta. Este 1 de junio de 2025, el escenario se tiñó de gris y fuego: más de 470 drones rusos fueron lanzados sobre Ucrania en lo que se ha convertido en el mayor ataque con aeronaves no tripuladas desde que comenzó la invasión total en febrero de 2022. Al mismo tiempo, se registró un devastador ataque con misiles que acabó con la vida de 12 soldados ucranianos e hirió a más de 60 en una unidad militar de entrenamiento alejada del frente.Una ofensiva aérea sin precedentes
Según datos del mando de la Fuerza Aérea de Ucrania, Rusia desplegó 472 drones entre la medianoche y la mañana del domingo, acompañados de siete misiles. Es importante recordar que los drones, una herramienta inicialmente utilizada para vigilancia, hoy se han convertido en armas letales capaces de quebrar la infraestructura militar y civil con precisión quirúrgica. Esta modalidad de guerra, más económica que el despliegue de cazas o tanques, refleja el cambio hacia una guerra de desgaste tecnológico.“Los cielos del frente están saturados de drones rusos buscando objetivos,” reportó Yuriy Ignat, portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana.La unidad atacada se ubicaba bien lejos del frente, en la retaguardia de los 1.000 kilómetros del frente activo. La aparición de estos ataques da cuenta de la versatilidad de la amenaza rusa: ya no existen zonas totalmente seguras dentro del territorio ucraniano.
Ucrania responde: drones ucranianos alcanzan Siberia
No obstante, la resistencia ucraniana no ha sido pasiva. Este mismo domingo, Ucrania ejecutó ataques con drones en lo más profundo del territorio ruso, impactando la región de Irkutsk, en pleno corazón de Siberia, a más de 4.500 kilómetros de Moscú. Aunque no hubo daños a civiles ni pérdidas materiales de consideración, el mensaje fue claro: Ucrania puede golpear donde menos se espera. Es la primera vez en el conflicto que una aeronave ucraniana no tripulada llega tan lejos, una demostración simbólica de que el poderío aéreo de Kiev ha evolucionado. También se registraron incursiones en las regiones rusas de Ryazán y Múrmansk, en el círculo polar ártico.Consecuencias humanas: fatiga y sospechas internas
El ataque ruso al centro de entrenamiento suscitó fuertes reacciones en la estructura militar ucraniana. Se ha conformado una comisión investigadora para analizar por qué los soldados fueron alcanzados en un lugar que debería estar fuera de alcance.“Si se determina que las acciones u omisiones de funcionarios provocaron la muerte o lesiones, serán considerados responsables”, declaró el Alto Mando del Ejército de Tierra.Esta declaración pone de manifiesto no solo la gravedad del ataque, sino también las posibles fricciones internas en la cadena de mando ucraniana, azotada por la escasez de personal, el cansancio crónico y una lucha constante por mantener la moral.
Fronteras en peligro: el norte bajo presión
Sumado a los acontecimientos en el aire, la situación terrestre también preocupa. El Ministerio de Defensa ruso declaró el domingo que ha tomado el control del poblado de Oleksiivka en la región de Sumy, al norte de Ucrania, provocando evacuaciones obligatorias en 11 localidades cercanas. La progresiva ocupación de esta región abre un nuevo frente, aumentando la presión sobre Kiev. El comandante en jefe de las fuerzas armadas ucranianas, Oleksandr Syrskyi, alertó que los ejes de avance más agresivos del ejército ruso se ubican en Pokrovsk, Toretsk, Lyman y en la región norteña de Sumy.Diálogo en medio del caos: ¿una paz en el horizonte?
A pesar del aumento de la violencia, Ucrania y Rusia sostendrán una nueva ronda de conversaciones de paz en Estambul. Rustem Umerov, Ministro de Defensa, encabezará la delegación ucraniana, según confirmó el presidente Volodimir Zelenskyy mediante un comunicado en su canal de Telegram.“Estamos haciendo todo lo posible para proteger nuestra independencia, nuestro Estado y nuestro pueblo”, dijo el mandatario.El cinismo de las negociaciones mientras los misiles vuelan por encima de las cabezas no escapa al análisis internacional. Ucrania ha exigido a Rusia un memorando explícito con sus propuestas de fin del conflicto antes de sentarse a negociar. El Kremlin asegura que lo entregará en la misma cita, lo cual genera escepticismo.
Las sombras reales del conflicto: impacto en la vida civil
Los informes sobre la destrucción en Gaza y en ciudades ucranianas como Járkov, Mariúpol o Bajmut comparten un hilo trágico común: imágenes de ciudadanos huyendo entre cenizas, padres abrazando cadáveres, vidas truncadas sin explicación. En Gaza, la cobertura reciente del fotógrafo Jehad Alshrafi mostró escenas casi idénticas a las de Ucrania: una bola de fuego rompiendo edificios, nubes de humo, civiles desesperados corriendo. No hay duda de que el uso masivo del poder aéreo se ha convertido en una herramienta estándar en los conflictos contemporáneos.Una guerra de alta tecnología y bajas esperanzas
Si algo queda claro tras el asalto de drones del 1 de junio de 2025 es que esta no es una guerra tradicional. Es un campo de batalla híbrido, saturado de tecnología militar, propaganda digital y negociaciones frágiles. La humanidad presente en las lágrimas de las madres y en los esfuerzos de los soldados sigue siendo la mayor víctima de esta maquinaria bélica. La duda persiste: ¿puede el diálogo superar el zumbido constante de los drones y el estallido de los misiles?Texto: Redacción Revista Hombre
Para más cobertura del conflicto en Ucrania, visita: https://apnews.com/hub/russia-ukraine
Este artículo fue redactado con información de Associated Press