Caídas, aprendizajes y futuro: Haliburton, Anthony Edwards y los desafíos de las nuevas estrellas NBA
Mientras los Knicks resisten y Oklahoma domina, figuras como Tyrese Haliburton y Anthony Edwards enfrentan retos que definirán sus carreras. ¿Están listos para el siguiente paso?
La hora de la verdad para Haliburton y los Pacers
Tyrese Haliburton brilló en el Juego 4 con una actuación histórica: 32 puntos, 15 asistencias, 12 rebotes y 0 pérdidas, un logro que no se veía en playoffs desde que los datos sobre pérdidas se empezaron a contar en 1977-78. Pero apenas dos noches después, en el Juego 5, se convirtió en una sombra de sí mismo, con solo 8 puntos, 6 asistencias y 2 rebotes.
La derrota ante los New York Knicks por 111-94 frenó momentáneamente el sueño de alcanzar la segunda final de la NBA en la historia de los Indiana Pacers. No es solo una cuestión de cifras, sino de presencia y liderazgo en momentos clave. Haliburton ni siquiera logró encestar en la primera mitad, en un partido donde los Pacers anotaron solo 45 puntos, muy lejos de lo mostrado unos días antes.
¿Los Knicks encendieron la defensa?
Parte del mérito corresponde a los Knicks. Aprendieron la lección del Juego 4, donde fueron superados en transición, y lograron frenar el desequilibrio de Haliburton. En ataque, Karl-Anthony Towns, pese a su golpe en la rodilla, aportó emocional y estadísticamente, en un juego donde cada punto significó resistencia a la eliminación.
El movimiento táctico de mantener a Mitchell Robinson en el quinteto también pareció funcionar, asegurando más control en los tableros. Sin embargo, el margen sigue siendo estrecho. La serie podría definirse en el Juego 6, y los Pacers volverán a tener la oportunidad de cerrar en casa. Pero para ello, necesitan a Haliburton al máximo de su capacidad.
Minnesota y Anthony Edwards: ¿Demasiado jóvenes aún?
Anthony Edwards ha liderado la nueva era de los Minnesota Timberwolves desde que fue seleccionado en el primer lugar del draft hace cinco años. Esta temporada tuvo sus mejores promedios en la NBA: 27.6 puntos por partido, 39.5% en triples y 83.7% desde la línea de tiros libres. Jugó en 79 de 82 partidos y lideró la liga en triples convertidos (320).
Pero la serie contra Oklahoma City Thunder reveló sus límites. Fue superado tan claramente por Shai Gilgeous-Alexander, el MVP de la temporada, que las dudas crecieron sobre si los Wolves están realmente listos para competir por un anillo.
Edwards fue limitado a menos de 20 puntos en tres de los cinco partidos. En conjunto, lanzó 6 de 31 en triples durante las derrotas. A pesar de ello, mostró destellos de madurez: circulación del balón, penetraciones y lectura del partido. Su frase postserie lo dice todo: “Nadie va a trabajar más duro que yo este verano”.
Shai, el MVP silencioso que no frena
Del otro lado, Shai Gilgeous-Alexander demostró una madurez ofensiva impresionante: 157 puntos frente a los 115 de Edwards, liderando también en intentos de tiro y tiros libres. La diferencia fue tan clara que incluso el propio técnico de los Timberwolves, Chris Finch, admitió que su joven estrella aún debe aprender a competir contra defensas físicas e inteligentes.
Y es que Oklahoma no solo atacó mejor. Su defensa fue un mecanismo colectivo que asfixió cada vía de escape para los Timberwolves. Como bien lo dijo Edwards: “Quince títeres en una misma cuerda” al describir la defensa de los Thunder.
La juventud de los Timberwolves se nota… y se paga
Con un núcleo joven encabezado por Edwards, Jaden McDaniels, Naz Reid y Donte DiVincenzo, más veteranos como Mike Conley y Rudy Gobert, el equipo prometía. Aun así, la falta de disciplina táctica y precisión bajo presión fue evidente ante un rival como Oklahoma.
El entrenador Finch utilizó una rotación de solo ocho jugadores a lo largo de los playoffs, pero las posibilidades de refrescarla existen. Jugadores como Terrence Shannon Jr., Rob Dillingham y Jaylen Clark buscarán minutos la próxima temporada. Además, Nickeil Alexander-Walker será agente libre y el futuro de Julius Randle y Naz Reid está en el aire mientras deciden si ejercer sus opciones de contrato.
¿Qué sigue para Haliburton y Edwards?
Ambos jugadores están llamados a ser pilares de la NBA del futuro. Pero por ahora, la presión, la experiencia y la consistencia siguen siendo los retos a superar.
- Para Haliburton, el reto inmediato será el próximo partido contra New York. ¿Puede replicar lo hecho en el Juego 4, donde fue imparable?
- Para Edwards, el verano se presenta como su estación más importante. Mejorar ofensiva y defensivamente, leer mejor los esquemas rivales y, sobre todo, liderar con más constancia.
En una NBA donde los márgenes de error son pequeños y la competencia brutal, talento no es suficiente. Ambos jugadores tienen potencial de superestrella. La pregunta es: ¿Llegarán a tiempo?
Como dijo Mike Conley: “Quizás eso signifique estudiar el juego más. Hacer entrenamientos individuales. Traer más cerca a los entrenadores. Usar las mentes que tienes alrededor para entender mejor el juego.”
Mientras tanto, el Thunder avanza a la Final del Oeste con autoridad, y los Knicks aún pelean con uñas y dientes por una supervivencia agónica. Y nosotros, como aficionados, esperamos la maduración de estas joyas que han llegado para quedarse.