Shai Gilgeous-Alexander: El nuevo rey del MVP y el ascenso imparable del Thunder
El canadiense lidera la revolución en Oklahoma City en medio de una histórica era global para la NBA
Una nueva era: El MVP vuelve a dar la vuelta al mundo
La NBA está presenciando un cambio de paradigma. Por séptima temporada consecutiva, el premio al Jugador Más Valioso (MVP) será entregado a un jugador nacido fuera de Estados Unidos. Esta tendencia global, que comenzó con la irrupción estelar de Giannis Antetokounmpo y Nikola Jokic, ahora tiene un nuevo protagonista de bandera canadiense: Shai Gilgeous-Alexander.
El base de los Oklahoma City Thunder ha destrozado las predicciones de principio de temporada y ha superado a titanes como Nikola Jokic —que tuvo una campaña histórica— y Giannis Antetokounmpo, para convertirse en el favorito indiscutido para alzarse con el premio más codiciado a nivel individual en el baloncesto.
El dominio de Shai: números que hablan por sí solos
Durante la temporada 2024-25, Gilgeous-Alexander promedió 32.7 puntos, 6.4 asistencias y 5 rebotes por partido. No sólo eso: lideró a su equipo a un imponente récord de 68-14, el mejor de toda la liga, reafirmando su estatus como auténtico motor de los Thunder.
Estos números colocan a Shai en una élite muy cerrada. Solo ocho jugadores en la historia de la NBA han promediado más de 30 puntos por partido en una temporada siendo parte de un equipo con más de 65 victorias. Entre ellos, nombres como Michael Jordan, Stephen Curry y James Harden.
“Shai no solo anota una cantidad increíble de puntos. Lo hace con eficiencia, liderazgo y una madurez táctica que sobrepasa su edad”, opinó Chris Mannix, analista de Sports Illustrated.
Una carrera mundializada: MVP sin fronteras
Shai Gilgeous-Alexander se une a un club de élite internacional junto a Antetokounmpo (Grecia), Jokic (Serbia), y Joel Embiid (Camerún/EEUU). Desde 2019, ningún estadounidense puramente nacido ha sido capaz de ganar el MVP, lo que confirma que el talento planetario ha tomado las riendas de la NBA.
Una tendencia llamativa que podría marcar una nueva diplomacia del baloncesto. La liga, cada vez más global, se alimenta de academias extranjeras, scouting intensivo y talentos que llegan con hambre de gloria, como Shai desde Toronto, Canadá.
Jokic: el titán que no fue suficiente
Nikola Jokic se convirtió esta temporada en el primer pívot de la historia en promediar un triple-doble: 29.6 puntos, 12.7 rebotes y 10.2 asistencias. Además, fue el primer jugador en terminar en el top 3 en esas tres categorías desde que se tiene registro.
Aún así, el éxito individual no fue suficiente frente al desempeño colectivo de los Thunder y el impacto general que tuvo Shai en su equipo y la narrativa de la temporada. El hecho de que Jokic ya tenga tres MVPs también influye: hay una tendencia (inconsciente o no) en los votantes a evitar repetir en exceso.
Giannis y Embiid: potencias que no alcanzan
Giannis Antetokounmpo también firmó otra temporada monstruosa: 30.4 puntos, 11.9 rebotes y 6.5 asistencias. Sin embargo, las inconsistencias de Milwaukee y una campaña con lesiones influyeron en la percepción del griego.
Por su parte, Joel Embiid, MVP defensor, quedó fuera de la terna final debido a una prolongada lesión. Su impacto cuando está sano sigue siendo tremendo, pero en una liga que premia el rendimiento sostenido, su ausencia fue determinante.
El nuevo emperador del Oeste
Más allá del MVP, Shai Gilgeous-Alexander ha sido el eje central de unos Thunder que han sorprendido a todos. En las Finales de la Conferencia Oeste, comenzaron dominando 1-0 la serie frente a los Minnesota Timberwolves con una contundente victoria de 114-88.
Shai anotó 31 puntos, incluidos 20 en la segunda mitad, demostrando que cuando más pesa la presión, él se crece. En contraste, los Wolves mostraron una versión apagada pese a llegar descansados tras una semana sin jugar.
Un dato revelador: Oklahoma City tuvo un récord de 54-5 en partidos decididos por más de 10 puntos, un testamento a su consistencia ofensiva y solidez defensiva.
Una joya canadiense a pulir en oro
Shai Gilgeous-Alexander nació en Toronto, Ontario, y fue seleccionado en el puesto número 11 del draft de 2018 por los Charlotte Hornets, quienes lo traspasaron inmediatamente a los Los Angeles Clippers. Llegó a los Thunder como parte del famoso traspaso de Paul George en 2019.
Desde entonces, su evolución ha sido constante. Pasó de ser un jugador prometedor a convertirse en líder absoluto, un anotador nato y uno de los mejores defensores en su posición. Además, terminó la temporada como campeón anotador, un logro que pocos MVPs recientes pueden presumir.
Otros premios de la temporada
- Entrenador del Año: Kenny Atkinson (Cleveland Cavaliers)
- Jugador Más Mejorado: Dyson Daniels (Atlanta Hawks)
- Novato del Año: Stephon Castle (San Antonio Spurs)
- Jugador Defensivo del Año: Evan Mobley (Cleveland Cavaliers)
- Jugador Más Clutch: Jalen Brunson (New York Knicks)
- Sexto Hombre del Año: Payton Pritchard (Boston Celtics)
- Ejecutivo del Año: Sam Presti (Oklahoma City Thunder)
- Premio al Compañero del Año: Stephen Curry (Golden State Warriors)
- Premio a la Justicia Social: Jrue Holiday (Boston Celtics)
Lo que viene: ¿el anillo?
El MVP es solo el principio. Los Thunder tienen hambre de más. Con uno de los núcleos jóvenes más talentosos de la liga —incluyendo a Jalen Williams, Chet Holmgren y Josh Giddey—, Oklahoma City tiene todo para soñar en grande.
Shai ha demostrado que puede liderar en temporada regular y en postemporada. Su madurez para jugar bajo presión, su versatilidad defensiva, su habilidad para atacar desde cualquier zona y su magnetismo como figura hacen pensar que podríamos estar ante el inicio de una dinastía.
"No es solo que Shai sea MVP, es que está transformando el baloncesto en Canadá y abriendo un nuevo capítulo para los Thunder. Es un fenómeno cultural más allá de lo deportivo", dijo en ESPN el periodista Adrian Wojnarowski.
Mientras tanto, Minnesota deberá ajustar si quiere competir en lo que queda de una serie que ya tiene dueño emocional: Gilgeous-Alexander y su tribu del trueno.