De héroes y redenciones: Las historias que marcaron la jornada dominical en la MLB

Desde un Devers encendido en Boston hasta la redención de Ronel Blanco con los Astros y el renacer de los Piratas tras un despido, el domingo en Grandes Ligas fue puro drama, talento y emoción.

Boston Red Sox: Rafael Devers se levanta como líder en clave de poder

En el Kauffman Stadium de Kansas City, Rafael Devers no solo empalmó un cuadrangular de 440 pies que quebró un empate crucial, sino que reafirmó su rol como piedra angular del ataque de los Red Sox. El jonrón, que se produjo en la sexta entrada con un corredor en base, fue su séptimo de la temporada y consolidó una semana de ensueño para el dominicano.

Lo más llamativo es el contexto. Devers fue titular como bateador designado solo dos días después de que John Henry, propietario de los Red Sox, volara a Kansas City para conversar personalmente con el jugador ante su negativa de jugar como primera base. ¿El resultado? Un Devers que el sábado se fue de 4-4 y que el domingo respondió con un bombazo antológico. La presión, al parecer, lo inspira.

“La pelota viajó como 140 metros. Fue un batazo que se sintió perfecto y que le dio la ventaja al equipo justo cuando más lo necesitábamos”, declaró Devers tras el partido, que terminó 3-1 a favor de Boston.

Lucas Giolito: Primer triunfo tras su renacer

Otro nombre propio que brilló fue Lucas Giolito. El derecho logró su primera victoria desde septiembre de 2023, tras perderse toda la temporada pasada por una lesión parcial del ligamento del codo. Giolito lanzó 6 2/3 entradas, permitió solo dos hits y no concedió carreras limpias. Fue una salida sólida en todos los aspectos, con una eficiencia notable luego de un error propio que permitió la única carrera de los Royals.

“He esperado más de un año por esto. Hoy me sentí como un novato que gana su primer juego”, dijo Giolito, con una sonrisa de alivio notable.

Ronel Blanco y la redención de un brazo en Houston

Mientras tanto, en Houston, Ronel Blanco vivió una jornada mágica. El derecho dominicano ponchó a once bateadores —una marca personal— en ocho entradas de dominio absoluto, y lideró a los Astros a un triunfo 6-0 sobre los Rojos de Cincinnati. Solo permitió dos imparables y controló cada tramo del juego con solvencia. Fue su apertura más larga desde su no-hitter histórico del año pasado ante los Blue Jays.

Blanco también fue clave tras la debacle del día anterior, cuando los Astros necesitaron seis relevistas para completar un partido caótico. Su actuación fue una inyección de moral para una rotación que sufrió la ausencia repentina de Lance McCullers Jr.

  • ERA de Blanco tras la jornada: 3.22
  • Registro actual: 3-3
  • 11 ponches: cifra más alta de su carrera

Y como si el guion necesitara más drama: José Altuve, uno de los pilares de Houston, no jugó por molestias musculares. Se espera que regrese en los próximos días.

Piratas de Pittsburgh: Victoria con sabor a esperanza tras la salida de Shelton

En Pittsburgh, Joey Bart se convirtió en héroe al conectar el sencillo decisivo en la novena entrada con las bases llenas para darle el triunfo a los Piratas 4-3 sobre los Bravos. Con eso, Pittsburgh se adjudicó la serie ante un rival de peso.

El momento fue particularmente simbólico ya que Derek Shelton fue despedido como manager antes de comenzar la serie, después de una racha de 10 derrotas en 11 juegos. En su lugar, tomó el timón el coach Don Kelly, que parece haber inyectado nueva energía al equipo.

“Hacía tiempo que no veíamos al equipo jugar con tanta intensidad. Todo el mundo estaba en la jugada desde el primer lanzamiento”, afirmó el nuevo entrenador Kelly tras el encuentro.

Claves del renacer 'Bucco'

  • Pitcheo sólido de Carmen Mlodzinski: 5 2/3 entradas sin permitir carreras.
  • La jugada decisiva de Bart, que rompió el empate con un hit que rozó el guante del torpedero.
  • Reacción emocional del público, que volvió a ilusionarse con el club tras semanas de malestar.

Una jornada que exalta las segundas oportunidades

En términos narrativos, la jornada dominical en la Gran Carpa fue una oda a la resiliencia y al talento emergente. Giolito recuperando su forma. Devers alejando las polémicas con madera en mano. Blanco demostrando por qué aún tiene mucho que ofrecer. Y Bart, el héroe inesperado, devolviéndole la credibilidad a Pittsburgh.

En una temporada en la que muchos equipos aún buscan su identidad, estas actuaciones no solo dan victorias, sino que inyectan esperanza y movilizan a fanáticos deseosos de algo más que estadísticas. Lo que presenciamos fue puro béisbol en su forma más humana, impredecible y emocionante.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press