Panorama divisional de la MLB: Luchas internas, promesas e incertidumbres

De los Rockies hundidos a la sorpresa de los Mariners, así se disputan las divisiones en la liga americana y nacional

La radiografía de la liga: luces y sombras en las diferentes divisiones

La temporada 2024 de las Grandes Ligas aún está en su etapa inicial, pero ya podemos empezar a leer las señales que indican cuáles equipos están en la senda correcta hacia una campaña exitosa y cuáles apenas buscan mantenerse a flote. Entre lesiones, momentos de forma, sorpresas inesperadas y desplomes preocupantes, la liga muestra su enorme diversidad competitiva. En este análisis, abordamos tres escenarios particulares con implicaciones divisionales: el drama de los Rockies de Colorado, la consolidación de los Mariners de Seattle, y el pulso en la División Este de la Liga Nacional.

Rockies de Colorado: cuando perder se convierte en hábito

Con una marca de 4-24, los Rockies son hoy por hoy el peor equipo del béisbol. Un equipo históricamente inconsistente, Colorado ha caído en una espiral de derrotas sin encontrar aún una fórmula eficiente para revertir su situación. Llevan siete derrotas consecutivas y su ERA colectivo de 5.46 en los últimos 10 partidos refleja una alarmante falta de control y producción desde el montículo. La ofensiva tampoco responde: batean tan solo .198 en sus últimos 10 juegos.

Este equipo ha sido superado por 21 carreras en ese tramo, y ni siquiera los brotes individuales como los de Jordan Beck (cinco jonrones y 10 remolcadas) o Hunter Goodman (11 hits en último tramo) parecen suficientes para sacar al club de este bache. La ausencia de un liderazgo visible, junto a lesiones clave –como las de Kris Bryant, Ezequiel Tovar y Thairo Estrada– condenan a Colorado a enfrentar una larga y dolorosa temporada de reconstrucción.

Bravos de Atlanta: sacudiéndose del letargo

En contraste casi cinematográfico, los Braves tienen una tendencia positiva reciente. Luego de un arranque vacilante, han ganado 8 de sus últimos 10 juegos con promedio de bateo colectivo de .287. No obstante, siguen siendo vulnerables fuera de casa (récord de 5-12 de visitantes).

Uno de los grandes factores que ha mantenido a Atlanta competitivo es su poder ofensivo: registran un slugging de .401, décimo mejor en MLB. Marcell Ozuna y Sean Murphy están contribuyendo de manera sólida, aunque resienten la ausencia temporal de Ronald Acuña Jr. y Spencer Strider por lesiones.

Mariners de Seattle: liderazgo inesperado en el Oeste

El Oeste de la Liga Americana parecía, en el papel, una disputa entre Astros, Rangers y quizás los Angels de contar con un roste sano. Pero a finales de abril los Seattle Mariners se posicionan como líderes de división (16-12). Su balance es estable, con un dominio en casa (10-6) y un registro general respetable. Son especialmente peligrosos cuando su ofensiva produce: tienen récord de 10-2 cuando anotan más de cinco carreras.

Dos nombres destacan en esta racha positiva. Cal Raleigh, con 10 cuadrangulares, ha sido una chispa constante, mientras que Jorge Polanco vive un momento estelar, bateando .371 en sus últimos 10 juegos con ocho remolques. Aunque la rotación de lanzadores ha sufrido golpes (lesiones de Logan Gilbert y George Kirby), Bryce Miller ha sido un sostén con 25 ponches hasta el momento.

Angels de Los Ángeles: otra temporada de frustraciones

Los Angels son el caso paradigmático del talento desperdiciado. La narrativa se repite: lesiones, inconsistencia y derrotas dolorosas. Actualmente tienen récord perdedor (12-15) y vienen de una racha negativa de 7 derrotas consecutivas fuera de casa. Su pitcheo simplemente no responde: Jack Kochanowicz, el probable abridor frente a Seattle, carga con un ERA de 5.47 y un WHIP de 1.48. La efectividad colectiva del equipo en los últimos 10 partidos está en 4.81 ERA, sumado a un pobre bateo de .171.

Aún con las contribuciones esperadas de Mike Trout y un alentador rendimiento reciente de Zach Neto (tres jonrones en 10 juegos), el equipo luce desconectado. Las múltiples lesiones –entre ellas Anthony Rendon y Robert Stephenson– complican aún más el panorama para un club que sigue sin encontrar rumbo desde el inicio de la era post-Ohtani.

División Este de la Liga Nacional: ¿una carrera de tres?

La división más competitiva de la Liga Nacional está comenzando a mostrar sus dientes. En el duelo entre Washington Nationals (13-16) y Philadelphia Phillies (15-13), ambos equipos luchan por posicionarse detrás de los hasta ahora líderes Mets (datos al momento de publicación). Ambos tienen argumentos válidos.

Philadelphia se ha hecho fuerte en casa (9-4 en Citizens Bank Park) y ostenta el tercer mejor on-base percentage de toda la liga (.338), con piezas como Bryson Stott y Alec Bohm ofreciendo producción constante. Del otro lado, Washington sigue defendiéndose con talento joven como Dylan Crews, que lleva .359 de promedio en 10 juegos recientes, y Keibert Ruiz, quien batea para .309.

El duelo de abridores entre Zack Wheeler (PHI) y MacKenzie Gore (WSH) en la próxima serie es un reflejo del atractivo de esta rivalidad. Ambos pitchers combinan una excelente relación de ponches y control: Wheeler ha abanicado a 50 en 36 entradas, mientras que Gore suma 53 en 35 innings.

Lo que viene: escenarios a seguir

  • ¿Cortarán su mala racha los Rockies? El equipo de Denver ya parece estar en fase experimental. Veremos emergentes o incluso cambios en dirección. Todo indica que este año será uno de transición total.
  • ¿Sobrevivirán los Mariners a su mar de lesiones? Su liderazgo es prometedor, pero sin brazos de confianza la temporada puede virar negativamente rápido. La rotación será clave en mayo.
  • ¿Angels al borde del colapso total? Con otro abril decepcionante, la incertidumbre sobre qué tan comprometido está el proyecto vuelve a florecer. ¿Seguirá Mike Trout remando solo?
  • ¿Phillies o Nationals como la verdadera amenaza del Este? Con los Braves aún sin despegar completamente, esta división podría definirse por rachas puntuales y resultados clave entre ellos.

El béisbol de abril es muchas veces engañoso, pero cuando los patrones se repiten –como los problemas crónicos en Rockies o Angels–, empiezan a levantarse las alertas. Unas alertas que, en muchos casos, terminan sonando todo el año.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press