Khaman Maluach: El gigante de Duke que se lanza al NBA Draft en busca de su destino

Con solo una temporada universitaria, el joven sudanés quiere conquistar la mejor liga de baloncesto del mundo

Un talento que apenas comienza a florecer

El futuro del baloncesto mundial está en constante evolución y un nuevo nombre acaba de consolidarse en las principales conversaciones: Khaman Maluach. Con tan solo una temporada en el programa de los Blue Devils de Duke, este pívot sudanés de 2.18 metros y 113 kilos ha decidido dar el salto al NBA Draft 2025. Una decisión que, aunque acelerada, parece natural para quien ya dejó ver atisbos de grandeza en la NCAA.

Su anuncio llega tras una temporada donde ayudó a Duke a regresar al Final Four, demostrando ser un factor clave en ambos extremos de la cancha. Su combinación de atletismo, presencia física y fundamentos técnicos le ha valido elogios, pero también genera interrogantes sobre cuánto más puede desarrollar su potencial.

De Sudán del Sur al estrellato universitario

Maluach nació en Sudán del Sur, un país relativamente joven que ha encontrado en el baloncesto una vía para brillar internacionalmente. Ingresó en la NBA Academy Africa en 2021, un programa diseñado para captar y perfeccionar talento fuera de Estados Unidos.

Su progreso fue meteórico: acudió al prestigioso Nike Hoop Summit en 2024 y terminó siendo considerado un Top 5 en los rankings nacionales de reclutamiento de 247Sports. A nivel internacional, representó a su nación en los Juegos Olímpicos de París 2024, un logro que pone en alto su prometedora trayectoria.

Sus números en Duke

Durante su única campaña en la NCAA, los números de Maluach fueron discretos pero muy eficientes:

  • 8.6 puntos por partido
  • 6.6 rebotes por partido
  • 1.3 tapones por partido
  • 71.2% de efectividad en tiros de campo
  • 76.6% en tiros libres
  • 4 triples encestados en la temporada

No cabe duda de que su longitud (envergadura de 2.26 metros y alcance de 2.95 metros) lo convierte en un prospecto ideal para el baloncesto moderno, donde la versatilidad defensiva y la movilidad son cruciales en los hombres grandes.

Fortalezas y áreas de mejora

Según los scouts, Maluach destaca como un excelente "rim runner", esa pieza valiosa en cualquier esquema ofensivo que corre la cancha y finaliza jugadas cerca del aro. Defensivamente, su capacidad para bloquear tiros y cambiar en situaciones de pick-and-roll es notable.

Sin embargo, su juego ofensivo aún es limitado. Si bien ha mostrado destellos de rango exterior, necesita pulir su bote, pase y visión de juego. En este momento, su creación ofensiva depende mucho del contexto y el sistema en el que opere.

Una salida marcada por la incertidumbre migratoria

No todo ha sido sencillo para Maluach. Al mismo tiempo que disputaba el Final Four, el Secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, anunció la revocación de todas las visas de pasaportes sudaneses debido a preocupaciones diplomáticas. Esto generó dudas sobre su estatus migratorio, aunque hasta el momento no se han reportado cambios que afecten su elegibilidad para ingresar a la NBA.

La Universidad de Duke comentó que estaba "evaluando las implicaciones para sus estudiantes", aunque no hubo información adicional que pusiera en riesgo inmediato la carrera deportiva del joven pívot.

El contexto Blue Devil: Reconstrucción a la vista

La salida de Maluach no es aislada. Duke también perderá otros pilares como Kon Knueppel, Tyrese Proctor, Cooper Flagg y Sion James. De hecho, toda su alineación titular se despedirá.

Afortunadamente para Jon Scheyer, llegan refuerzos de primer nivel: Cameron y Cayden Boozer encabezan una de las mejores clases reclutadoras del país. Aun así, el vacío que deja una torre como Maluach no es sencillo de llenar… ni en lo deportivo, ni en términos emocionales.

Proyección NBA: ¿Dónde podría caer?

Con 19 años, Maluach será uno de los jugadores más jóvenes disponibles en el draft de 2025. Analistas como Jonathan Wasserman de Bleacher Report y Kevin O'Connor de The Ringer lo proyectan como un pick de lotería (entre el 10 y el 20).

Equipos en reconstrucción que buscan un proyecto a largo plazo, como los Portland Trail Blazers o los Charlotte Hornets, podrían ser destinos ideales. Especialmente si buscan anclar su defensa a un pívot que pueda impactar en ambas zonas.

Además, su experiencia en torneos internacionales podría ayudarlo a adaptarse más rápidamente a las exigencias físicas y tácticas de la NBA.

La influencia de Sudán del Sur en el básquet

El surgimiento de Khaman Maluach se suma a otros talentos sudaneses que han dejado su huella en la liga, como Manute Bol y su hijo Bol Bol. El país africano, que entró al Comité Olímpico Internacional apenas en 2015, está utilizando el deporte como uno de sus principales mecanismos diplomáticos y de visibilidad en el mundo.

En la fase de preparación olímpica, Maluach fue considerado una de las piezas más importantes para un equipo que sorprendió y emocionó, mostrando la resiliencia de un país joven en el escenario global.

Una historia apenas en construcción

"Su mejor baloncesto aún está por venir", dijo Jon Scheyer en su emotiva despedida. Palabras que, más allá del protocolo, resumen la sensación generalizada en los scouts y analistas.

Khaman Maluach es, de algún modo, un lienzo en blanco con pinceladas de grandeza. Un jugador cuyo potencial podría redefinir las expectativas para los nuevos pívots modernos: móviles, versátiles, decididos a proteger el aro y generar desequilibrios ofensivos.

El Draft 2025 será solo su primer peldaño. Lo que vendrá después, está en sus manos… y en su inagotable envergadura.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press