El hambre en Gaza: tragedia silenciosa en medio del conflicto
La crisis alimentaria se profundiza tras el bloqueo de Israel, amenazando a una generación completa de palestinos
Por Redacción Especial
Más de 60 días sin suministros en Gaza
Desde el 2 de marzo de 2025, Gaza vive uno de los bloqueos más severos en su historia. Israel detuvo por completo el ingreso de alimentos, combustible y medicinas, alegando presionar a Hamas por la liberación de rehenes. Sin embargo, organismos humanitarios advierten que esta medida amenaza de hambruna a los 2,3 millones de palestinos atrapados en el enclave costero.
La situación es crítica: mercados vacíos, precios de los alimentos disparados y una población alimentándose casi exclusivamente de productos enlatados, arroz y pasta. La escasez y el hambre son palpables en cada campamento de desplazados.
Fridays: De la tradición festiva a la pobreza extrema
Tradicionalmente, los viernes son días sagrados entre los palestinos. Antes de la guerra, las familias se reunían alrededor de platos abundantes de carne, verduras rellenas y especialidades locales. Hoy, un día festivo en Gaza puede consistir en compartir entre 11 personas una olla de guisantes con arroz cocinada sobre leña improvisada, como relató Mariam al-Najjar desde su tienda en Khan Younis.
"Nunca comimos guisantes de lata antes de la guerra," dice Mariam. "Ahora eso es todo lo que tenemos."
Una crisis nutricional alarmante
El impacto de la malnutrición es especialmente devastador entre los niños. Según datos de Naciones Unidas, unos 3,700 niños padecían desnutrición aguda en Gaza en marzo de 2025, un aumento del 80% respecto a febrero.
El Dr. Ayman Abu Teir, jefe de la unidad de Nutrición Terapéutica en el Hospital Nasser en Khan Younis, advirtió: "Este incremento es sustancial y alarmante. La falta de proteínas, frutas y lácteos afectará irreversiblemente el desarrollo infantil."
Un niño de un año debería consumir alrededor de 700 calorías diarias. La familia al-Najjar compartió una comida de apenas 1,000 calorías entre 11 miembros, ilustrando cuán crítica es la situación.
Israel, Hamas y el debate sobre la ayuda humanitaria
Israel sostiene que hubo suficiente distribución de ayuda humanitaria durante la tregua que finalizó en marzo. Además, acusa a Hamas de desviar recursos para su propósito político-militar. Human Rights Watch y otras organizaciones, sin embargo, desacreditan esta afirmación, asegurando que Naciones Unidas ejerce un control estricto sobre la distribución.
Mientras se debate en el ámbito internacional, la realidad en Gaza es que las pocas verduras disponibles —tomates, pepinos y berenjenas— tienen precios inalcanzables para una población empobrecida. Un kilo de tomate, por ejemplo, se vende a más de 50 shekels (casi 14 dólares), comparado con menos de un dólar antes del conflicto.
El colapso de la producción local de alimentos
La devastación no solo afecta los mercados, sino también a los productores locales. La destrucción de tierras agrícolas y el cierre de áreas dentro de zonas militares han llevado a una caída estrepitosa en la producción de alimentos.
Mahmoud al-Shaer, agricultor de Khan Younis, explica: "Antes cultivaba 600 kilos de tomates semanales; ahora apenas logro 150." Sin agua, semillas o fertilizantes, la producción terminará desapareciendo completamente en las próximas semanas.
Una generación condenada a la desnutrición
Los efectos de la malnutrición en los niños pequeños podrían ser irreversibles. La falta prolongada de nutrientes esenciales afecta el desarrollo cognitivo, físico e inmunológico, poniendo en riesgo a toda una generación.
"Si no obtenemos alimentos ricos en proteínas y vitaminas ahora," advierte Dr. Abu Teir, "veremos incrementos drásticos en enfermedades infecciosas, retrasos de crecimiento y discapacidades permanentes."
Caridades y cocinas comunitarias al borde del colapso
Con los mercados inaccesibles, las cocinas comunitarias se convirtieron en el único recurso para miles de familias. Pero incluso estas están agonizando.
El Programa Mundial de Alimentos anunció que las 47 cocinas que apoyaba agotaron sus existencias en abril de 2025. Esto amenaza con dejar sin raciones de comida a cientos de miles de personas.
"Estamos sirviendo únicamente lentejas o arroz simple, y las porciones son cada vez más pequeñas," afirma Hani Abu Qasim, responsable de una cocina en Rafah. "Estos niños dependen de nosotros; si cerramos, se enfrentan al hambre total."
¿Hambre como táctica de guerra?
Organizaciones como Amnistía Internacional califican el bloqueo como una "táctica de hambruna" prohibida por el derecho internacional humanitario. Según el artículo 54 del Protocolo Adicional I de las Convenciones de Ginebra, “prohibir el acceso a bienes indispensables para la supervivencia civil” puede constituir un crimen de guerra.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha debatido varias veces imponer corredores humanitarios en Gaza, pero los vetos políticos han impedido acciones significativas.
Testimonios que claman al cielo
"Sueño con un tomate," dice entre lágrimas Khalil al-Faqawi, padre de nueve hijos. "Mis hijos piden carne, pollo, una simple galleta. Solo tenemos lentejas. ¿Y cuando se acaben?"
Sumaya al-Najjar, de 61 años, enferma de cáncer, renunció a su medicación para intentar mantener con vida a sus nietos. "Tengo miedo que mis hijos y nietos mueran de hambre ante mis ojos," se lamenta.
Cifras que estremecen
- Más de 51,000 muertos en Gaza desde el inicio del conflicto (Ministerio de Salud de Gaza, 2025).
- 1,200 israelíes muertos en los ataques del 7 de octubre de 2023, perpetrados por Hamas.
- Casi el 90% de la población desplazada de sus hogares.
- El 80% de los alimentos disponibles antes de la guerra ahora desaparecidos.
¿Qué sigue?
Mientras el mundo debate resoluciones y acuerdos diplomáticos, millones de personas en Gaza enfrentan cada día la lucha más elemental: sobrevivir sin comida. Una catástrofe humanitaria está en curso, en una de las regiones más densamente pobladas del mundo.
La historia no olvidará fácilmente estos días oscuros en Gaza.