Draft NFL 2025: Cam Ward, Travis Hunter y el fenómeno internacional que revoluciona la liga

Un análisis del potencial cambio generacional en la NFL: desde la reinvención de los Titans con Cam Ward, pasando por el fenómeno de dos vías Travis Hunter, hasta el sorprendente ascenso del británico Mapalo Mwansa

Cam Ward: la esperanza de los Titans

El Draft de la NFL 2025 se avecina con apuestas altas y decisiones que marcarán el destino de varias franquicias. Una de las narrativas más llamativas es la elección número uno de los Tennessee Titans, quienes han enfrentado tres temporadas perdedoras consecutivas y numerosos cambios en su estructura directiva y técnica. Con Mike Borgonzi como nuevo gerente general, la franquicia ha decidido no intercambiar su primera selección, pese a recibir múltiples ofertas. ¿El motivo? Todo apunta a que seleccionarán al quarterback Cam Ward de la Universidad de Miami.

Ward tuvo una temporada impresionante: completó el 67.2% de sus pases, lanzó para 4,313 yardas y registró 39 pases de touchdown, la mejor marca de la FBS, con solo siete intercepciones. Esto lo posicionó cuarto en la votación al Trofeo Heisman. La inteligencia, el liderazgo y la ética de trabajo de Ward han sido resaltadas tanto por Borgonzi como por el nuevo entrenador en jefe, Brian Callahan.

Actualmente, los Titans tienen a Will Levis, seleccionado en el segundo día del Draft 2023, y dos quarterbacks veteranos en la plantilla. Aun así, la organización cree que es el momento de apostar por un mariscal de campo franquicia, y todas las señales apuntan a que Ward será el elegido para encabezar esta nueva etapa.

Travis Hunter: el unicornio moderno del fútbol americano

Otro nombre que enciende las antorchas del debate es Travis Hunter, jugador de la Universidad de Colorado, que podría ser elegido en la segunda posición del Draft. Hunter es uno de los casos más raros en la historia reciente: un jugador de doble vía, desempeñándose con éxito como receptor abierto y esquinero. En 2024, acumuló 96 recepciones para 1,258 yardas y 15 TDs, además de aportar 35 tacleadas, 4 intercepciones y 11 pases desviados en defensa.

Hunter jugó la asombrosa cantidad de 1,484 jugadas en una sola temporada universitaria —para ponerlo en contexto, el Defensive Player of the Year en la NFL, Patrick Surtain II, jugó 978 jugadas defensivas en toda la temporada pasada. Sin embargo, Champ Bailey, miembro del Salón de la Fama y ex jugador bidireccional en la NCAA, advierte sobre los desafíos que conlleva este estilo de juego en la NFL.

“Hacer una cosa en la NFL ya es difícil. Hacer dos de alto nivel al mismo tiempo es casi una locura. Pero Travis tiene el talento para lograrlo”, dijo Bailey.

Para Bailey, todo dependerá del equipo al que Hunter llegue: esquema, entrenadores, compañeros y su rol principal. Como receptor o esquinero, Hunter es excepcional, pero intentar ambas posiciones en el nivel profesional requerirá entrenamiento mental, físico y emocional riguroso. Además, exigirá un cuerpo técnico dispuesto a permitirle cruzar la línea de scrimmage con frecuencia.

Mapalo Mwansa: el sueño improbable del británico que enamoró a la NFL

Detrás del espectacular escenario del Draft también se esconde una historia improbable pero inspiradora: Mapalo “Maz” Mwansa, un joven británico de 20 años que hasta hace poco ni siquiera consideraba el fútbol americano como una opción de vida. Criado en Peterborough, Inglaterra, Mwansa practicaba rugby, atletismo, baloncesto y cricket. Su transición se dio gracias a una carrera de 100 metros en 10.48 segundos que llamó la atención en Loughborough University.

Después se unió al equipo universitario de fútbol americano y, tras un auge vertiginoso, llegó al NFL International Pathway Program (IPP), un campamento de 10 semanas en la IMG Academy en Florida diseñado para atraer talento internacional. Mwansa también jugó con la selección nacional de Reino Unido mientras trabajaba en una firma contable de prestigio, Baker Tilly International.

“Hace dos años, el fútbol americano ni estaba en mi radar. Ahora estoy soñando con cruzar el escenario del Draft,” contó Mwansa con incredulidad.

La NFL se vuelve global

La inclusión de Mwansa no es aislada. Otros jugadores internacionales siguen su mismo rumbo:

  • James Burnip (Australia) – Punter de Alabama con 45.37 yardas de promedio.
  • Jeremy Crawshaw (Australia) – Punter de Florida con récord escolar de 46.4 yardas por despeje.
  • Kurtis Rourke (Canadá) – Quarterback con 3,042 yardas tras liderar a Indiana al College Football Playoff.
  • Nathaniel Salmon (Nueva Zelanda) – Exjugador de básquet con cuerpo ideal de tight end.
  • Laki Tasi (Australia) – Exjugador de rugby, 6’6” y 348 libras, con futuro en la línea defensiva.
  • Jeneiro Wakeham (Fiyi) – Exrugby convertido en liniero ofensivo, 6'9" y 320 libras.

Este movimiento internacional, impulsado por el IPP, refuerza que la NFL no solo se convierte en una liga global por sus audiencias, sino también por el talento en el campo. Más de una docena de jugadores internacionales han encontrado un lugar en plantillas activas gracias a esta iniciativa.

¿El futuro inmediato? Cam Ward, Travis Hunter y una nueva internacionalización

El Draft 2025 podría ser recordado como un punto de inflexión. Los Titans buscan en Cam Ward un redentor y pilar ofensivo. Travis Hunter desafía las normas con su ambición bidireccional sin precedentes desde los días de Deion Sanders. Y jugadores como Mwansa redefinen lo posible, demostrando que el talento se cultiva incluso en lugares donde el ovoide no siempre ha sido rey.

La pregunta no es si estos jugadores cambiarán la liga, sino cuánto lo harán.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press