José Ramírez sigue haciendo historia con los Guardians: una noche mágica en Cleveland
El dominicano conecta un jonrón de tres carreras y supera a una leyenda del Salón de la Fama en extrabases con los Guardians
Por fin, la magia de José Ramírez volvió a desatarse en Cleveland, y no pudo llegar en mejor momento. En una noche intensa en Progressive Field, el tercera base dominicano no solo fue clave en la victoria 6-4 de los Cleveland Guardians sobre los Yankees de Nueva York, sino que también dejó su nombre grabado aún más profundamente en la historia del equipo.
Una victoria ante el líder de la Liga Americana
La atmósfera era eléctrica. Los Yankees, líderes de la Liga Americana, llegaban con un imponente récord y una ofensiva encabezada por Aaron Judge, el Jugador Más Valioso reinante. Pero los Guardians tenían otros planes. Liderados por el histórico José Ramírez y el prometedor Kyle Manzardo, los locales dominaron desde temprano.
Fue en la tercera entrada cuando llegó el momento cumbre. Con dos hombres en base, Ramírez conectó un jonrón de tres carreras ante Clarke Schmidt, encendiendo a la multitud. En el siguiente lanzamiento, Manzardo no se quedó atrás y mandó otra pelota a las gradas. En apenas dos pitcheos, Cleveland destrozó las opciones del abridor neoyorquino.
Superando a una leyenda del Salón de la Fama
El batazo de Ramírez no solo representó una actuación clave en la victoria. El dominicano superó a Tris Speaker, integrante del Salón de la Fama, y se convirtió en el segundo jugador con más extrabases en la historia de la franquicia.
Con 668 extrabases, Ramírez ahora solo es superado por Earl Averill, quien acumuló 724. Este dato es aún más impresionante si se considera que todos esos batazos de Ramírez han sido con los Guardians.
“José es uno de los jugadores más constantes y subestimados de su generación. Siempre aparece en los momentos importantes”, comentó el manager de Cleveland tras el juego.
Manzardo, el nuevo prodigio de los Guardians
Mientras Ramírez hace historia, Kyle Manzardo se convierte en protagonista del presente. El joven ha conectado jonrones en tres partidos consecutivos, y ya suma siete cuadrangulares, la mayor cantidad del equipo esta temporada.
Su facilidad para hacer contacto y su poder a la banda contraria lo han establecido como un valor clave en la alineación. Y lo hizo ante los Yankees, uno de los equipos más dominantes del 2025.
Una ofensiva oportuna que silenció a los Yankees
A pesar del esfuerzo tardío de Jasson Domínguez y Jazz Chisholm Jr., quienes conectaron jonrones en la séptima y octava entradas respectivamente, los Yankees no pudieron remontar. Su ofensiva fue ineficaz en momentos clave: terminaron 0 de 5 con corredores en posición de anotar.
Judge extendió su racha de juegos embasado a 19 partidos, pero falló en el momento más importante del juego al poncharse con un corredor en segunda y dos outs en la novena.
La mejor versión de Gavin Williams
En el montículo, Gavin Williams (2-1) tuvo su mejor salida de la temporada. Enfrentó a una ofensiva temible y permitió solo dos carreras en 6 1/3 entradas, con siete hits y cuatro ponches. Fue su primera victoria ante un rival del Este de la Americana en ocho intentos.
El cierre quedó en manos del novato Cade Smith, quien se apuntó su segundo salvamento de su carrera, el primero de esta campaña. Lo hizo frente a Aaron Judge. Nada más y nada menos.
Una rivalidad que sigue encendida
Este fue el primer enfrentamiento entre Yankees y Guardians desde la Serie de Campeonato de la Liga Americana de 2024, la cual ganaron los neoyorquinos. Cleveland venía con sed de revancha, y vaya que lo dejaron claro.
Ahora, el enfrentamiento particular entre ambas franquicias se pone interesante con aún dos juegos más en esta serie. En el próximo encuentro, los Yankees enviarán a Will Warren (1-0, 5.17 ERA) al montículo, mientras que los Guardians contarán con Tanner Bibee (1-2, 5.85 ERA).
Ramírez: ídolo y referente
José Ramírez llegó a MLB en 2013 con apenas 20 años. Desde entonces, ha sido un ejemplo de consistencia y compromiso. Aunque no cuenta con el aura mediática de grandes astros como Mike Trout o Aaron Judge, Ramírez ha sido uno de los cinco mejores jugadores ofensivos de la última década, si tomamos en cuenta estadísticas avanzadas como WAR (Victorias Sobre Reemplazo).
En sus 11 temporadas con los Guardians, el dominicano ha promediado:
- .279 de promedio al bate
- 28 jonrones por temporada
- 90 carreras remolcadas
- .850 de OPS
Además, ha sido All-Star en cinco ocasiones y ha ganado cuatro Bates de Plata. Sigue siendo, también, un modelo de fidelidad a una sola organización, en una época donde los cambios de equipo a menudo dominan la narrativa de la liga.
¿Un futuro Salón de la Fama?
Con los números que acumula y la consistencia que muestra año tras año, no es descabellado imaginar a José Ramírez como futuro miembro del Salón de la Fama. Aunque aún le queda camino por recorrer, ya es el líder activo en extrabases entre tercera base con una franquicia.
Incluso podría terminar como el máximo líder de la historia de Cleveland en extrabases, superando los 724 de Earl Averill si se mantiene en ritmo por al menos dos temporadas más.
Los Yankees necesitan recalibrar
A pesar de estar en la cima de la Liga Americana, los Yankees han mostrado ciertos puntos flacos. Sus derrotas recientes tienen un mismo patrón: poco bateo oportuno y fragilidad del bullpen.
Además, depender demasiado de figuras como Aaron Judge podría ser problemático si otros como Giancarlo Stanton o Anthony Rizzo no despiertan o si los jóvenes como Domínguez no se consolidan a largo plazo.
Con un bullpen que ha tenido problemas para cerrar juegos contra ofensivas consistentes, Nueva York deberá ajustar de cara al verano, especialmente si quieren llegar bien armados a octubre.
El Este de la Americana, una batalla sin tregua
La División Este de la Liga Americana vuelve a estar entre las más competitivas del béisbol. Tan solo una pequeña racha negativa puede significar quedar relegado al tercer o cuarto lugar. Por eso, cada victoria ante rivales de otras divisiones, como la que logró Cleveland, cobra aún más valor.
Para los Guardians, esta victoria es también una declaración: están listos. Listos para competir, para pelear la postemporada y seguir siendo ese equipo que nunca desaparece pese a presupuestos más bajos.
Y mientras tengan a José Ramírez, nada parece imposible.