Champions League: El drama de los cuartos de final y la eterna magia de las remontadas
Inter prende fuego en Múnich, Real Madrid clama por otro milagro ante Arsenal y la épica regresa al torneo más pasional del fútbol europeo
La Liga de Campeones volvió a recordarnos por qué es el torneo más emocionante del planeta fútbol. Y es que los cuartos de final de esta edición han sido un festival de emociones, narrativas cruzadas y vestuarios encendidos que dejan claro que aquí nadie se rinde hasta el último segundo. En un torneo donde la historia pesa más que cualquier trazo táctico, revivimos dos de las historias más intensas que nos ha dejado esta etapa: la victoria de Inter de Milán sobre el Bayern Múnich en Alemania, con una polémica celebración incluida, y el intento desesperado —pero no imposible— de Real Madrid por remontar un 0-3 ante Arsenal.
Inter pisa fuerte en Alemania... ¿demasiado fuerte?
El Inter dio la campanada en el Allianz Arena al vencer 2-1 al Bayern Múnich. Lautaro Martínez abrió el marcador, Thomas Müller igualó a cinco minutos del final, y cuando todo parecía resuelto, Davide Frattesi selló la victoria con un gol que desató una celebración eufórica. El italiano se quitó la camiseta, recibió una amarilla, y desató la furia en el vestuario alemán.
El delantero inglés Harry Kane fue el primero en desenterrar el hacha de guerra: “Celebraron como si ya hubieran ganado la eliminatoria”, dijo tras el partido. Su técnico, Vincent Kompany, coincidió y encendió más la hoguera previa al duelo de vuelta en San Siro este miércoles.
Pero en Milán se defienden. “Solo estábamos contentos”, respondió el mediocampista Henrikh Mkhitaryan. “Fue solo la emoción del momento”. Su técnico, Simone Inzaghi, lo dejó claro: no están celebrando antes de tiempo. Saben que Bayern sigue siendo el coco europeo, un rival que los ha vencido en sus cuatro visitas anteriores al San Siro.
La revancha de una historia que lleva catorce años cocinándose
La rivalidad entre Inter y Bayern tiene sabor a final. En 2010, el Inter de José Mourinho se coronaba campeón de Europa en el Santiago Bernabéu al vencer 2-0 justamente al conjunto alemán. Lo hizo con aquella versión de fútbol pragmático y letal, con Diego Milito como héroe y Zanetti como emblema. Desde entonces, cada cruce entre ambos conlleva esa tensión silenciosa que emerge cuando el pasado regresa a la memoria.
Pero ahora los papeles parecen invertidos. Inter juega más ofensivo, con una plantilla joven, veloz, pero también sufrida. Bayern vive una temporada convulsa, con cambios de entrenador, crisis de identidad y un vestuario que huele a confusión. ¿Podrá romper su mala racha en Italia?
El nuevo viejo Madrid: "Sueña, Bernabéu"
La otra gran historia de estos cuartos es la gesta —aparentemente imposible— que tiene por delante el Real Madrid. Cayó 3-0 en la ida ante un Arsenal pletórico, sólido en todas sus líneas y que no ha recibido tres goles o más en sus últimos casi 80 partidos. Pero como dice el club en su web: “Bernabéu, otra vez”. Porque si hay un club capaz de dar vuelta esta situación, es el equipo merengue.
Su entrenador, Carlo Ancelotti, ha sido claro: “Tenemos todos los recursos para remontar”. Y esos recursos son muchos: la experiencia de Luka Modric, la inspiración puntual de Rodrygo, el liderazgo de Toni Kroos, y sobre todo, ese intangible llamado mística.
Los récords que inspiran: las remontadas imposibles que ya ocurrieron
Remontar un 3-0 como local es poco frecuente, pero no imposible. Solo cuatro equipos en la historia de la Champions League lo han logrado, según datos de UEFA:
- Barcelona en 2017: perdió 4-0 con PSG y ganó 6-1 en el Camp Nou.
- Liverpool en 2019: remontó un 3-0 ante el Barça con un 4-0 en Anfield.
- Deportivo La Coruña en 2004: cayó 4-1 con Milan y ganó 4-0 en Riazor.
- El propio Real Madrid en 2022: forzó prórroga con PSG y City en casa con remontadas agónicas.
Por eso, los blancos creen. Porque han vivido noches de locura goleadora en el Santiago Bernabéu, como la del doblete de Rodrygo al 90’ y 91’ para tumbar al Manchester City. O el hat-trick de Karim Benzema ante PSG. Las hazañas recientes alimentan la fe, y en Madrid eso es suficiente para agotar entradas y poner a temblar a cualquiera.
El rival: un Arsenal revitalizado y sólido
Pero el problema se llama Arsenal. El equipo de Mikel Arteta llega en un momento formidable, líder moral y simbólico de la Premier League junto al City. No ha encajado tres goles desde diciembre de 2023 en un loco 4-3 ante Luton. Posee una estructura sólida, dinámica, intensa. Con Odegaard creando, Saka desbordando y Declan Rice recuperando, el Arsenal luce como el equipo más trabajado del año.
Tiene ambición, quiere volver a una final de Champions que no pisa desde 2006. Y tiene confianza. Pero también sabe que en el Bernabéu pesa el escudo más que las estadísticas.
La psicología del miedo y el freno mental
Lo que ha demostrado Champions año tras año es que el factor mental es igual o más determinante que el técnico o físico. Es ahí donde Madrid, Inter o Bayern marcan la diferencia. Escenarios colosales como el Allianz, el Bernabéu o San Siro generan ansiedad en el rival. Escuchar a 80.000 almas cantar el himno de la Champions provoca electricidad.
Un gol temprano cambia toda la narrativa. Un fallo rival se convierte en esperanza. Y ahí se construyen las leyendas.
Fútbol, drama y guión de película
Estamos ante unos cuartos de final que se escriben con tinta de epopeya. Las declaraciones de Kane, la sobriedad de Mkhitaryan, el grito de fe de Ancelotti y el silencio disciplinado de Arteta componen una danza perfecta en esta Champions. No sabremos quién avanzará. Pero sabemos que la pasión no va a faltar.
Porque ahí está Frattesi quitándose la camiseta como símbolo definitivo de una noche inolvidable. Porque ahí está el Bernabéu esperando recordar por qué es el teatro por excelencia del imposible hecho realidad.
Porque esta es la Champions League... y aquí todo puede pasar.