Una jornada histórica para cerrar la temporada regular de la NBA
Desde la gesta épica de los Pacers hasta el récord de longevidad de Chris Paul, el juego 82 del calendario dejó momentos inolvidables en la liga
El último día de la temporada regular de la NBA 2024-25 fue cualquier cosa menos rutinario. A pesar de que muchos equipos habían asegurado sus posiciones para los playoffs o el play-in, este domingo nos regaló un capítulo lleno de récords, gestas inesperadas y ejemplos de perseverancia que quedarán grabados en la historia de la liga.
Los Pacers firman la remontada más grande de su historia
Rick Carlisle lo advirtió antes del partido: los primeros 81 juegos de Indiana habían sido "eventful", es decir, llenos de momentos importantes. Pero nada se compararía con el 82.
En un juego sin consecuencias para la clasificación, con Cleveland descansando a la mayoría de sus titulares tras haber asegurado el mejor récord del Este, los Pacers protagonizaron la mayor remontada en sus cinco décadas de historia, superando 27 puntos para imponerse 126-118 en doble tiempo extra.
Lo asombroso no fue sólo la remontada, sino quién la logró. Carlisle, que había decidido no arriesgar a cuatro jugadores clave de su rotación, incluido Tyrese Haliburton, volcó el destino del partido en manos de jugadores de contratos duales y no garantizados: Quenton Jackson, Enrique Freeman, RayJ Dennis, Tony Bradley y Johnny Furphy. Juntos, superaron a los Cavaliers 53-24 en los últimos 18 minutos del partido.
“Demostraron tanto coraje y fortaleza, fue increíble”, declaró Carlisle. “Por esto obtuvimos una temporada de 50 victorias, algo que realmente debe hacernos sentir orgullosos”.
La anterior máxima remontada de Indiana databa de marzo de 2014, cuando levantaron un déficit de 25 puntos ante Detroit. Además, esta gesta es también la mayor remontada de toda la temporada 2024-25 de la NBA, superando las recuperaciones de 26 puntos por parte de los Clippers y Celtics.
Chris Paul hace historia… otra vez
En San Antonio, un veterano de mil batallas escribió un nuevo capítulo en su largo historial. Chris Paul, de 39 años y en su temporada número 20, se convirtió en el primer jugador en iniciar los 82 partidos en una campaña tan avanzada en términos de carrera.
La marca anterior la tenía el gran John Stockton, quien en su temporada 19 fue titular en todos los juegos. “Es una locura. Cuando estás en medio de esto, sólo piensas: ‘Ok, juego 30, juego 40…’ Y de repente, es el 82”, explicó Paul.
Paul se unió a un selecto grupo de leyendas como Michael Jordan, Kareem Abdul-Jabbar, Kobe Bryant y Dirk Nowitzki, quienes alcanzaron las 20 temporadas en la NBA. Si regresa el próximo año, será el jugador número 5 en completar 21 campañas en la liga.
Además de Paul, otros cinco jugadores iniciaron los 82 partidos esta temporada: Mikal Bridges (New York), Jaden McDaniels (Minnesota), Jalen Green (Houston), Jarrett Allen (Cleveland) y Harrison Barnes (San Antonio).
Destaca el caso de Mikal Bridges, quien participó en su 556º partido consecutivo de temporada regular, cifra que no interrumpió ni siquiera con su traslado de Brooklyn a Nueva York a mitad de temporada.
“Eso es por lo que CP es uno de los más grandes”, dijo Bridges. “No creo que llegue tan lejos, pero respeto profundamente su logro”.
Memphis aprovecha a sus reservas y cierra con contundencia
En el otro extremo del espectro competitivo, los Memphis Grizzlies derrotaron categóricamente a los Dallas Mavericks 132-97 en un partido donde ambos equipos reservaron a sus principales figuras en vista del play-in del Oeste.
Sin las estrellas Ja Morant, Jaren Jackson Jr. ni Desmond Bane, Memphis se lució con actuaciones destacadas de jugadores poco habituales:
- Lamar Stevens registró su mayor anotación en la NBA con 31 puntos.
- Marvin Bagley III sumó un doble-doble con 25 puntos y 11 rebotes.
- El base Yuki Kawamura, oriundo de Japón, ofreció jugadas espectaculares incluyendo una asistencia a Bagley tras una recuperación y otra de fantasía entre las piernas a Cam Spencer.
Memphis superó a Dallas 65-43 en la segunda mitad, mostrando su profundidad de cara al decisivo duelo de play-in ante los Golden State Warriors.
El juego 82: símbolo de orgullo, no de trámite
Durante muchos años, el último partido de temporada ha sido visto como una formalidad, e incluso cuestionado por ser percibido como irrelevante. Sin embargo, tanto Chris Paul como Rick Carlisle y jugadores como Bridges o Jackson nos recordaron que cada oportunidad en esta liga puede ser una historia de inspiración.
Carlisle cerró su jornada dando una lección de liderazgo: llamó al vestuario a los cinco héroes anónimos que habían gestado la remontada para ser aplaudidos por sus compañeros titulares. “Estos chicos fueron una inspiración”, dijo emocionado.
Y aunque algunos no podrán estar en la postemporada por reglamento de contratos duales, lo que dejaron sobre la cancha servirá como testimonio de lo que representa el espíritu competitivo de la NBA.
Mientras los playoffs inician, no debemos olvidar que la historia también se escribe en juegos que el calendario considera triviales. Porque para ciertos jugadores y entrenadores, el juego número 82 fue todo menos eso.