El poder juvenil de Jackson Chourio arrasa Coors Field: ¿el despertar ofensivo definitivo de los Cerveceros?

Con una actuación explosiva de cinco carreras impulsadas, el prospecto venezolano lidera una paliza histórica de Milwaukee sobre los Rockies

Por fin, después de años sin conquistar la altura de Denver, los Milwaukee Brewers rompieron su sequía en el Coors Field con una victoria demoledora 17-2 frente a los Colorado Rockies. Pero más allá del marcador escandaloso, fue la aparición estelar del joven venezolano Jackson Chourio lo que marcó el verdadero hito de la noche.

Chourio brilla como supernova

Con apenas 20 años, Chourio está demostrando que su meteórico ascenso en las ligas menores no fue casualidad. El miércoles 9 de abril de 2025 será una fecha para recordar: conectó un jonrón de tres carreras, un doble e impulsó un total de cinco carreras, consolidando la paliza más lopsided que Milwaukee haya propinado en Colorado desde 2018.

Pero esto no fue una actuación aislada. Jackson Chourio acumula ya cuatro cuadrangulares en esta joven temporada, y su presencia en la parte alta del orden al bate de Craig Counsell agrega una dimensión ofensiva peligrosa que le urgía al equipo desde el retiro parcial de Ryan Braun.

Un equipo en sintonía: Milwaukee despierta

No fue solo Chourio. El lineup completo de los Brewers jugó al ataque con una sincronización pasmosa. William Contreras y Christian Yelich también se fueron para la calle, mientras que Brice Turang mantiene su sorprendente streak ofensiva con al menos un hit en los doce primeros partidos —igualando la segunda mejor marca en la historia de la franquicia, solo por detrás de Dickie Thon (1993), que logró 13 juegos consecutivos.

“La energía de estos muchachos es contagiosa”, dijo el manager de los Brewers en entrevista postpartido. “Cuando ves a un chico como Jackson (Chourio) divertirse y dominar a ese nivel, es difícil no subir el nivel colectivo”.

Una noche desastrosa para los Rockies

Del otro lado, los Rockies siguen navegando por aguas turbulentas. Con marca de 2-9, ya son el equipo con menos carreras anotadas (33) en lo que va de temporada, y acumulan cuatro errores en un solo encuentro, una pesadilla defensiva que no sufrían desde 1999.

El abridor Antonio Senzatela fue castigado con nueve carreras (ocho limpias) en 4 1/3 entradas y no pudo replicar sus dos sólidas salidas previas. Además, incluso los reconocidos guantes de Brenton Doyle y Ezequiel Tovar —ambos ganadores del Guante de Oro— estuvieron erráticos, cometiendo errores claves que abrieron el grifo ofensivo de Milwaukee.

Un noveno inning para el olvido

El relevo de los Rockies fue otro campo minado. En la novena entrada, Seth Halvorsen permitió siete carreras, incluyendo un error garrafal al lanzar mal a la primera base en un rodado suave de Chourio que terminó con dos carreras anotadas. Luego, vino el cuadrangular de dos carreras de Yelich. El hundimiento era inevitable.

Coors Field: maldición rota

La victoria no solo fue significativa por la cantidad de carreras. Se trató del primer triunfo en serie para los Brewers en Coors Field desde 2018. Este estadio, conocido por favorecer a los bateadores debido a su altitud y la falta de resistencia del aire, irónicamente había representado una trampa para Milwaukee durante años.

Con la serie ya en el bolsillo, las estadísticas indican que los Brewers están entrando en ritmo. En sus últimos 10 partidos, presentan un récord de 7-3, con un promedio de carreras anotadas por encima de 5 y una ERA de 3.96.

Contexto histórico: ¿una temporada prometedora?

Desde la partida de Josh Hader y la consolidación de Corbin Burnes y Brandon Woodruff, los Brewers han buscado desesperadamente una identidad ofensiva. Chourio, promovido el año pasado, parece estar preparado —tanto física como mentalmente— para tomar la batuta.

Sus habilidades comparan favorablemente con algunas jóvenes estrellas latinoamericanas que impactaron rápido en la MLB, como Ronald Acuña Jr. o Juan Soto. A su edad, ninguno tuvo un juego de cinco carreras impulsadas tan temprano en la temporada.

¿El retorno del "Cervecero Power"?

Si bien es temprano en la temporada, los números ofensivos colectivos de Milwaukee son sólidos. Cuentan con un OBP de .314, sexto en toda la Liga Nacional. Y lo más valioso: combinan juventud y experiencia. Christian Yelich nuevamente se muestra confiable, William Contreras aporta estabilidad desde la receptoría, y Chourio, Turang y Sal Frelick representan el futuro inmediato.

La química es clara, y los fanáticos ya sueñan con una temporada como la de 2018, cuando llegaron a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional (NLCS).

En memoria de Dotel y Blanco

En medio de la vorágine del partido, hubo un momento solemne: los Rockies realizaron un minuto de silencio por las muertes del exlanzador Octavio Dotel y el exjugador Tony Blanco, víctimas del colapso de un techo en una discoteca en la República Dominicana. Un recordatorio de que detrás de cada jugador hay vidas humanas y comunidades que también sufren y celebran con ellos.

Lo que viene: más pruebas para los Rockies

El lanzador Ryan Feltner abrirá el próximo juego para Colorado, mientras que los Brewers contarán con Quinn Priester, en su debut oficial con el equipo tras ser adquirido desde Boston.

Para Colorado, no todo está perdido, pero el margen de error se vuelve cada vez más pequeño. Las lesiones (Gomber, Criswell, Estrada) complican una plantilla ya sin profundidad, y la producción juvenil —prometida desde hace dos temporadas— aún no se materializa en victorias.

Datos clave del encuentro

  • Racha activa: Brice Turang con 12 juegos seguidos conectando de hit.
  • Rendimiento colectivo: Milwaukee bateó para .243 en los últimos 10 juegos.
  • ERA del staff: 3.96 para Brewers vs. 5.32 de los Rockies.
  • Error costoso: Halvorsen permitió 7 carreras en la novena entrada.
  • Record en casa: Rockies con solo 1 triunfo en 5 juegos en Coors Field.

¿Puede Chourio sostener este nivel?

Los más escépticos aseguran que aún es demasiado prematuro ponerlo a nivel estrella, pero si el venezolano mantiene este ritmo, podría ganarse seriamente una candidatura para Rookie del Año. En entrevistas, se le ve sereno, enfocado y sobre todo, humilde. Con solo 21 años por cumplir, parece tener un futuro brillante adornado con batazos, jugadas espectaculares y, muy pronto quizás, una invitación al All-Star Game.

Milwaukee tiene motivos para soñar. Y Jackson Chourio, razones para seguir bateando autos y robando titulares.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press