El regreso de Unai Emery al Parque de los Príncipes: fantasmas del pasado y nuevas esperanzas
Ocho años después de la debacle histórica ante el Barcelona, el técnico español regresa a París liderando a un Aston Villa resurgente, con viejos conocidos y cuentas pendientes
París, 2017. Parc des Princes. PSG contra Barcelona. Minuto 95. Sergi Roberto anota el sexto gol azulgrana y sella una remontada que pasaría a la historia como la más dolorosa jamás vivida por el club parisino. El PSG, dirigido entonces por Unai Emery, se convirtió en el protagonista involuntario de una tragedia futbolística sin precedentes: fue el primer equipo en la historia de la Champions League en desperdiciar una ventaja de 4-0 del partido de ida.
Ocho años más tarde, Emery regresa al mismo escenario, pero esta vez como técnico de un Aston Villa revitalizado y ambicioso. Su equipo se enfrentará al Paris Saint-Germain en los cuartos de final de la máxima competición continental, marcando un hito para ambos clubes: para Villa, la primera vez en esta fase desde 1983, y para el PSG, una nueva oportunidad de redención frente a los fantasmas del pasado.
La herida de 2017: “La noche en la que todo salió mal”
Emery resumió su experiencia en París como "una época difícil" donde "el equipo necesitaba adaptarse a mí y yo a ellos". Su etapa en PSG siempre estará manchada por aquella derrota ante el Barcelona, un trauma que todavía atormenta a los hinchas parisinos. En aquel partido, el PSG llegó al Camp Nou con una ventaja de 4-0, pero terminó cayendo 6-1, lo que supuso una humillación histórica y una pesadilla táctica para el entonces joven técnico español.
Aquel fracaso precipitó una revolución en el PSG: pocos meses después, Qatar Sports Investments (QSI) desembolsó 422 millones de euros para fichar a Neymar y Kylian Mbappé, en un intento desesperado por dar un golpe de autoridad en Europa. Pero ni siquiera ellos pudieron revertir la suerte del equipo parisino bajo Emery.
Volver al Infierno: ¿redención o recaída?
Ahora con Aston Villa, Emery ha recuperado su prestigio y ha demostrado su maestría táctica llevando al modesto equipo de Birmingham a una racha de siete victorias consecutivas y de nuevo a las grandes noches europeas, algo impensado hace apenas tres años. Para Villa, este partido será una oportunidad de oro para hacer historia, mientras que para Emery será una batalla emocional cargada de simbolismo.
Marcus Rashford: un viejo verdugo del PSG vuelve al ruedo
Otra cara conocida que regresa a París para enfrentar al PSG es Marcus Rashford, ahora cedido al Aston Villa. En 2019, siendo jugador del Manchester United, Rashford fue el encargado de ejecutar el penalti decisivo en el minuto 94 que eliminó al PSG en los octavos de final, tras ganar 3-1 en el Parque de los Príncipes pese a haber perdido 0-2 en Old Trafford.
Ese gol fue un dardo más al orgullo parisino y generó ira interna, especialmente en el entonces técnico Thomas Tuchel, quien criticó duramente la falta de enfoque y seriedad de sus jugadores en los días previos. Rashford no solo fue el verdugo, fue el rostro de la humillación.
Digne y Asensio: ex PSG con sentimientos encontrados
También forman parte de Villa otros dos jugadores que tienen historia con el PSG: Lucas Digne y Marco Asensio. El primero defendió los colores parisinos como lateral izquierdo hace más de una década, tras firmar con el conjunto francés por 15 millones de euros procedente del Lille. Aunque mostró destellos de calidad, nunca logró consolidarse como titular. Su destino lo llevaría posteriormente a la Roma, el Barcelona, y finalmente al fútbol inglés, donde actualmente brilla con continuidad y experiencia.
Por su parte, Asensio es propiedad del PSG, aunque juega cedido en Villa desde el último mercado invernal. Bajo las órdenes de Luis Enrique, no tenía minutos en un ataque parisino centrado en Mbappé y Dembélé, pero en Aston Villa ha emergido como uno de los grandes protagonistas del equipo. Ocho goles en 11 partidos, incluyendo un triplete contra el Club Brugge, avalan su condición de “super suplente” de lujo. Para Emery, el jugador que conoció en el Real Madrid está de vuelta.
Un entrenador de torneos europeos
Pocos entrenadores tienen el historial continental de Unai Emery. Ganador de la Europa League en cuatro ocasiones (tres con el Sevilla y una con Villarreal), supo llevar al mismo Villarreal a las semifinales de Champions en 2022, al derrotar al Bayern Múnich en cuartos. Su capacidad técnica y su habilidad para preparar los partidos de eliminación directa son innegables.
Ahora al mando de Aston Villa, un equipo que no pisaba los cuartos de final desde 1983, Emery parece encontrar el entorno ideal: un club histórico, alejado del eje mediático de los gigantes europeos, pero con hambre de gloria y una plantilla eficaz.
Messi, Rashford, Martínez: el eco de otras noches europeas
Mientras Emery mira al pasado en París y al presente con Villa, otros protagonistas de estas semanas también reviven viejas gestas. Lionel Messi, aunque ya no esté en Europa, sigue dando que hablar en la MLS. Su último gol con Inter Miami contra Toronto FC fue su número 40 desde que llegó a Estados Unidos. En cuatro partidos esta temporada ha participado directamente en goles, consolidando su impacto en la liga.
Messi fue la gran figura del Barcelona en aquella mítica remontada contra el PSG en 2017. Ahora, alejado del Camp Nou, del PSG y del Viejo Continente, la comparación entre su estrellato global y las luchas de Emery en París ofrece un contraste interesante: uno marcaba goles imposibles; el otro intentaba contener un vestuario lleno de egos.
Similar es el caso de Josef Martínez, quien marcó un triplete en la última jornada con San Jose Earthquakes, alcanzando 120 goles en 190 partidos en la MLS, y ubicándose como el sexto máximo goleador histórico de la liga. Otro actor cuya historia sigue creciendo fuera de Europa, recordándonos que el fútbol es mundial, pero sus heridas a veces son muy locales.
¿Puede Aston Villa sorprender al PSG?
A pesar del presupuesto inferior, el menor “glamour” y la experiencia limitada en Champions de varios de sus jugadores, el Aston Villa de Emery llega con la ventaja del conocimiento táctico, la motivación de los desafíos y una plantilla en sintonía. Asensio está en forma; Rashford conoce el guion; Digne juega como en sus mejores días; y sobre todo, Unai Emery conoce al PSG como pocos.
Las probabilidades pueden no estar a su favor, pero como bien sabe el PSG, las noches europeas no entienden de lógica. Cuestiónenselo a Messi en 2017. Pregúntenselo a Rashford en 2019. O simplemente miren a Emery, que regresa al infierno donde cayó con la ambición de ser esta vez el que dicte sentencia.