Yamandú Orsi asume la presidencia de Uruguay: un retorno a la centroizquierda
El líder del Frente Amplio promete fortalecer la red de seguridad social y reactivar el crecimiento económico
El retorno del Frente Amplio
Yamandú Orsi, exalcalde y profesor de historia de tendencia izquierdista, asumió la presidencia de Uruguay el 1 de marzo de 2025. Con él, el Frente Amplio—una coalición de moderados, comunistas y sindicalistas—regresa al poder después de cinco años de gobierno conservador bajo Luis Lacalle Pou.
Su victoria fue vista como un retorno a un modelo de gobierno que, entre 2005 y 2020, impulsó un histórico ciclo de crecimiento que redujo la pobreza y posicionó a Uruguay como un país estable en términos económicos y progresista en políticas sociales.
Un liderazgo conciliador en tiempos de polarización
En su discurso de toma de posesión, Orsi enfatizó la importancia del respeto por la democracia y la necesidad de evitar la división extrema, una clara referencia a la creciente polarización en América Latina.
“Seamos adversarios, pero nunca enemigos.”
Dichas palabras, pronunciadas frente a líderes nacionales y mandatarios extranjeros como Gabriel Boric (Chile), Gustavo Petro (Colombia) y Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), consolidaron su imagen de político moderado y abierto al diálogo.
Desafíos económicos y sociales
A pesar del optimismo que rodeó su asunción, Orsi enfrenta retos significativos:
- Recuperación económica: Uruguay ha experimentado un crecimiento estancado, y su gobierno deberá equilibrar la inversión social con medidas que fomenten la competitividad.
- Descontento sindical: Los sectores más radicales dentro del Frente Amplio piden revertir las políticas de austeridad implementadas por Lacalle Pou, incluyendo la reforma de pensiones.
- Seguridad: El aumento de la delincuencia ha sido un problema persistente que deberá abordar mediante estrategias efectivas y sostenibles.
Una izquierda pragmática
Orsi ha tratado de posicionarse como un líder pragmático, buscando un equilibrio entre las demandas sociales y la necesidad de mantener la estabilidad económica. Expertos consideran que su verdadera prueba será enfrentar las reasignaciones presupuestarias y la presión sindical sin comprometer la confianza de inversionistas y sectores productivos.
“El país necesita recuperar una senda de crecimiento que genere empleo digno y permita una mejor distribución del ingreso.” — Yamandú Orsi
Con un gobierno de coalición diverso y un panorama internacional cambiante, el futuro de Uruguay dependerá de la habilidad de Orsi para consolidar un liderazgo eficaz y evitar caer en promesas difíciles de cumplir.