El fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos contra Chipre: Un hito en la lucha contra la violencia de género
La corte dictaminó que las autoridades chipriotas fallaron en investigar adecuadamente la denuncia de violación de una joven británica en 2019
Una investigación defectuosa y sesgada
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) emitió un fallo clave sobre la negligencia de las autoridades chipriotas en la investigación de una denuncia de violación hecha por una joven británica en 2019 en la ciudad turística de Ayia Napa. Según la sentencia, la policía y los fiscales de Chipre no cumplieron con su obligación de realizar una investigación rigurosa e imparcial, lo que socavó la confianza en el sistema de justicia y permitió un entorno de impunidad.
El caso que sacudió a tres países
El caso, ampliamente cubierto por la prensa de Chipre, el Reino Unido e Israel, involucró a una mujer de 18 años que denunció haber sido violada por un grupo de turistas israelíes. Sin embargo, pronto la historia dio un vuelco inesperado cuando los sospechosos fueron liberados y la denunciante se encontró en el banquillo, acusada de “perjuicio público”.
El problema principal, según el TEDH, fue que las autoridades chipriotas aceptaron de manera acrítica los testimonios de los acusados y no investigaron adecuadamente si la joven había brindado consentimiento en el presunto acto sexual. Testimonios revelaron que ella manifestó no estar interesada en mantener relaciones con múltiples hombres y expresó reiteradamente su negativa, la cual fue ignorada.
Factores ignorados
El fallo del tribunal europeo también resaltó que la policía no consideró factores fundamentales, tales como el estado de consciencia de la víctima al momento del hecho. Se registró que la mujer había ingerido alcohol y trazas de cocaína fueron encontradas en su organismo, lo que podría haber afectado su capacidad de consentimiento.
Además, se detectaron múltiples fallos en la recopilación de pruebas. El análisis forense fue insuficiente, al no recolectar huellas dactilares del lugar, y no se entrevistó a posibles testigos clave que podrían haber brindado una visión más estructurada de lo sucedido la noche del ataque.
Una sentencia que refuerza los derechos de las víctimas
El fallo del TEDH enfatizó que este caso refleja prejuicios de género en el sistema de justicia de Chipre. “Este tipo de sesgos impiden proporcionar una protección efectiva a las víctimas de violencia de género y corren el riesgo de desincentivar a otras víctimas de confiar en el sistema judicial”, indica el documento.
La organización Justice Abroad, que asesoró legalmente a la joven ante el TEDH, calificó esta decisión como un hito en la defensa de los derechos de las víctimas de violencia sexual. Su director, Michael Polak, declaró: “Este fallo deja claro que las denuncias de violencia sexual deben ser investigadas de manera rigurosa, sin obstáculos institucionales”.
Revisión del caso y su impacto
En 2022, el Tribunal Supremo de Chipre revocó la condena impuesta a la joven británica argumentando que su confesión había sido obtenida bajo coacción y sin representación legal, lo que violaba sus derechos fundamentales. Sin embargo, el daño a su reputación y el trauma sufrido por el trato de las autoridades chipriotas ya estaba hecho.
Esta sentencia del TEDH obliga a Chipre a revisar sus procedimientos legales en casos de delitos sexuales y a garantizar que las víctimas reciban protección y acceso equitativo a la justicia.
¿Un precedente real?
Aunque este fallo representa una victoria jurídica para la joven y un revés para el sistema judicial chipriota, queda por ver si traerá cambios tangibles en el país y Europa en general. En muchos lugares, las víctimas de violencia sexual siguen enfrentando obstáculos sistémicos en la búsqueda de justicia. Organizaciones de derechos humanos esperan que esta decisión sirva de referencia para futuras reformas.