Las tensiones entre Ucrania y EE.UU.: una alianza en crisis
El debilitamiento del respaldo estadounidense y el giro de Donald Trump hacia Rusia ponen en jaque la estabilidad de Kiev
Mientras Ucrania se acerca al tercer aniversario de la invasión rusa, el país enfrenta un desafío inesperado: la incertidumbre sobre el apoyo de su histórico aliado, Estados Unidos. Desde la llegada de Donald Trump a la presidencia, las relaciones han tomado una dirección preocupante, con acusaciones de desinformación y una posible reducción del respaldo militar.
El cambio de postura de EE.UU.
Ucrania ha dependido en gran medida del apoyo militar y financiero de Estados Unidos para resistir la agresión rusa. Sin embargo, la reciente retórica de Trump, donde calificó al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy de “dictador”, ha generado alarma en Kiev. Además, el exmandatario estadounidense ha insinuado la posibilidad de un alto al fuego en términos favorables para Moscú, lo que contradice la postura de resistencia de Ucrania y sus aliados europeos.
El impacto en la política interna de Ucrania
Las declaraciones de Trump no solo han generado críticas en el extranjero, sino que han unificado a la opinión pública ucraniana en defensa de Zelenskyy, quien, pese a ser visto con ojos críticos en ciertos sectores internos, sigue contando con un respaldo significativo. De acuerdo con una encuesta reciente del Instituto Internacional de Sociología de Kiev, el 57% de la población confía en el presidente.
Los partidos de oposición también se han pronunciado, señalando que solo los ciudadanos ucranianos tienen derecho a juzgar a su líder. Yaroslav Zhelezniak, del partido Holos, destacó: “Podemos tener diferencias con Zelenskyy, pero solo los ucranianos pueden determinar su continuidad en el poder.”
Ucrania en el frente de batalla
Mientras tanto, las fuerzas militares ucranianas enfrentan uno de sus momentos más difíciles. Con avances lentos pero constantes del ejército ruso, y con la posibilidad de que la ayuda militar estadounidense se reduzca, los soldados en el frente han expresado su disposición a combatir con los recursos que tengan a su disposición. “No importa si nos quedamos sin municiones, seguiremos luchando con rifles, y si no hay rifles, usaremos palas”, declaró un oficial ucraniano al frente de batalla.
El dilema de las elecciones en Ucrania
Una de las polémicas que ha alimentado la narrativa de Trump es la suspensión de las elecciones en Ucrania. Si bien el exmandatario estadounidense argumenta que Zelenskyy debería convocarlas, en Kiev la situación se ve de otra manera. Con millones de desplazados en el extranjero y miles de soldados en el frente, realizar comicios en estas condiciones sería prácticamente inviable. Volodymyr Ariev, del partido opositor Solidaridad Europea, señaló que unas elecciones en este contexto solo beneficiarían a Rusia, debilitando la unidad nacional.
¿Cómo responderá Europa?
Ante la incertidumbre del apoyo estadounidense, varios países europeos han comenzado a discutir planes para establecer una presencia militar en Ucrania y garantizar la estabilidad. Aunque el presidente francés Emmanuel Macron y el primer ministro británico Keir Starmer apoyan la idea de una “fuerza de seguridad europea”, la propuesta enfrenta escepticismo. Alemania, por ejemplo, ha manifestado preocupación sobre la viabilidad de una intervención sin el respaldo militar de la OTAN.
¿Hacia dónde va el conflicto?
Las tensiones entre Kiev y Washington reflejan un reacomodo en la geopolítica internacional. Mientras Europa busca nuevas estrategias para apoyar a Ucrania, Trump parece inclinarse hacia Rusia. ¿Podrá Ucrania resistir la presión sin el mismo nivel de apoyo estadounidense? ¿Será Europa capaz de llenar ese vacío? Lo que es seguro es que la guerra sigue su curso, y la estabilidad de toda la región está en juego.