Elon Musk y la idea de devolver dinero a los contribuyentes: ¿Es viable?

Una propuesta en redes sociales ha captado la atención de la Casa Blanca, pero los expertos en presupuesto dudan de su factibilidad.

¿De dónde surge esta propuesta?

Todo comenzó con una idea promovida por James Fishback, fundador de la firma de inversión Azoria Partners, quien propuso en X (anteriormente Twitter) que parte de los recortes de gasto impulsados por el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), liderado por Elon Musk, fueran devueltos a los contribuyentes. La propuesta sugiere que si se logran los $2 billones en ahorros el próximo año, una quinta parte de esa cantidad podría distribuirse como cheques de $5,000 para los hogares que pagan impuestos.

El presidente Donald Trump respaldó entusiastamente la idea, afirmando: “Me encanta”. Sin embargo, los analistas de presupuesto ven con escepticismo la posibilidad de recortar tal cantidad de gasto público, pues representa casi un tercio del presupuesto anual del gobierno federal.

¿Qué tan realistas son estos recortes?

Musk ha declarado que su Departamento de Eficiencia Gubernamental ya ha logrado ahorrar $55,000 millones, una mínima fracción de los $6.8 billones del presupuesto federal. Sin embargo, hasta ahora no se han verificado esas cifras, y algunas afirmaciones del DOGE, como que millones de personas fallecidas están recibiendo Seguridad Social de manera fraudulenta, han sido desacreditadas.

A lo largo de la historia, diversas administraciones han intentado eliminar el desperdicio en el gasto gubernamental, pero con pocos resultados significativos. John DiIulio Jr., politólogo de la Universidad de Pensilvania, afirmó en un informe para Brookings Institution que incluso eliminando por completo la fuerza laboral federal civil, solo se reduciría el 5% del gasto total del gobierno.

¿Qué posibilidades hay de recibir un cheque?

La propuesta establece que los posibles cheques solo se entregarían cuando DOGE complete su trabajo, previsto para julio de 2026. De lograrse los recortes estimados, uno de cada cinco dólares ahorrados se destinaría a pagos directos a los hogares que pagan impuestos, dejando fuera aproximadamente al 40% de la población que no paga estos tributos.

Pero aquí está el problema: muchos economistas dudan de que DOGE pueda ahorrar siquiera una fracción significativa del presupuesto federal. A lo largo de los años, el despilfarro gubernamental ha sido un tema de debate recurrente, pero los intentos por controlarlo han sido infructuosos debido a la complejidad del sistema de gasto.

¿Podría esto provocar inflación?

Una de las principales preocupaciones de los expertos es que una nueva ronda de cheques a los hogares podría avivar la inflación. Durante la pandemia, tanto Trump como Biden distribuyeron pagos de estímulo directo, lo que según algunos economistas contribuyó a la inflación más alta en cuatro décadas.

Trump y su equipo económico argumentan que estos pagos no generarían el mismo efecto inflacionario, ya que provendrían de dinero que, de todas formas, ya estaba destinado al gasto público. No obstante, economistas como Ernie Tedeschi, de la Universidad de Yale, sostienen que en medio de un mercado laboral ajustado, cualquier nueva inyección de dinero en la economía podría causar un alza en los precios.

Incluso dentro del Partido Demócrata, algunos expertos coinciden en que la medida no generaría inflación, pero por una razón diferente: simplemente no existen los fondos necesarios para concretarla.

Reflexión final

Si bien la idea de recibir un cheque de $5,000 suena atractiva, la viabilidad de los recortes masivos de gasto y su redistribución es altamente cuestionable. La historia nos ha enseñado que reducir el gasto gubernamental es un desafío monumental, y la propuesta de Musk y Fishback enfrenta numerosos obstáculos prácticos.

Más allá de la viabilidad política y económica, esta propuesta demuestra cómo las redes sociales pueden transformar ideas teóricamente simples en debates nacionales de alto nivel, poniendo a prueba los límites del presupuesto y la política fiscal en Estados Unidos.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press