La racha de los Cavaliers y la crisis de los Mavericks: dos caras de la moneda en la NBA
Cleveland domina el Este con autoridad mientras Dallas se desmorona por lesiones y decisiones polémicas.
El dominio arrollador de los Cavaliers
Los Cleveland Cavaliers siguen demostrando que son una de las franquicias más sólidas de la presente temporada de la NBA. Con su victoria por 131-108 sobre los Toronto Raptors, los Cavs lograron su cuarta victoria consecutiva y han ganado ocho de los últimos nueve juegos. No solo aseguraron el liderato en la Conferencia Este, sino que además completaron una barrida en la serie de temporada ante Toronto.
Donovan Mitchell brilló con 21 puntos, acompañado de una notable actuación colectiva. De’Andre Hunter sumó 18 unidades, Sam Merrill aportó 16 y Darius Garland contribuyó con 15. Evan Mobley, con 12 puntos y 15 rebotes, y Jarrett Allen, con un doble-doble de 13 puntos y 10 rebotes, fueron piezas clave en la pintura.
Un momento de controversia
La victoria de los Cavaliers no estuvo exenta de polémica. Con solo cuatro segundos restantes en el reloj, Tristan Thompson decidió completar un mate que encendió los ánimos en la duela. Scottie Barnes no se tomó bien el gesto y confrontó a Thompson en mitad de la cancha, generando una acalorada discusión.
A pesar del incidente, Cleveland cerró con autoridad el partido y reafirmó su dominio sobre Toronto. Con una ventaja máxima de 39 puntos durante el encuentro, los Cavs demostraron por qué son contendientes serios en la Conferencia Este.
Los Raptors, en caída libre
Para los Toronto Raptors, la derrota significa otro revés en una temporada llena de inconsistencias. RJ Barrett fue el máximo anotador del equipo con 27 puntos en su regreso tras estar fuera por el protocolo de conmoción, mientras que Barnes aportó un doble-doble con 16 unidades y 11 rebotes. Sin embargo, la defensa del equipo fue incapaz de detener la ofensiva de Cleveland.
Con este resultado, los Raptors han perdido cinco de sus últimos seis partidos y parecen lejos de poder competir por un puesto en los playoffs.
Dallas Mavericks, una franquicia en crisis
Mientras los Cavaliers celebran, la situación en los Dallas Mavericks es completamente diferente. La franquicia tejana atraviesa un momento crítico tras la polémica salida de Luka Doncic rumbo a Los Ángeles Lakers y una plaga de lesiones que ha diezmado al equipo.
El entrenador Jason Kidd admitió que necesitó un respiro luego de la derrota de su equipo en tiempo extra ante Sacramento. Optó por no hablar con los medios después del partido del lunes, explicando que se sentía frustrado y no quería decir algo de lo que luego se arrepintiera.
Un equipo plagado de bajas
Los Mavericks han visto cómo su rotación se ha desmoronado en los últimos encuentros. En la derrota contra los Kings, el equipo perdió a su último pívot en activo con experiencia en la liga, Daniel Gafford, lo que dejó a Dallas con un solo jugador disponible de más de 6’8” de altura: el novato Kylor Kelley.
A esto se suman las ausencias de Dereck Lively II, lesionado del tobillo, P.J. Washington Jr., también fuera por un esguince, y Anthony Davis, quien llegó desde los Lakers en el traspaso de Luka pero se lesionó en su debut con los Mavs.
El descontento de los aficionados
El gerente general de los Mavericks, Nico Harrison, ha sido duramente criticado por los fanáticos debido a los recientes movimientos de la franquicia. Algunos incluso han llegado a enviarle amenazas de muerte, algo que el entrenador de los Warriors, Steve Kerr, lamentó profundamente.
“He pasado por algo similar cuando fui gerente en Phoenix e hice un traspaso con Shaquille O’Neal. Es lamentable ver a Nico enfrentarse a este nivel de odio,” comentó Kerr.
El futuro de ambas franquicias
Mientras los Cavaliers siguen su camino triunfal con la mira puesta en los playoffs, los Mavericks intentan recomponerse en un panorama sombrío. Su próximo partido después del All-Star será clave para ver si pueden detener la caída libre y encontrar estabilidad en una temporada que se ha salido de control.
