La Corte de Mujeres en Honolulu: un modelo de justicia restaurativa con impacto transformador
El innovador programa Mohala Wahine busca alternativas al encarcelamiento para mujeres en situaciones vulnerables, con miras a expandirse a todas las islas hawaianas.
Mohala Wahine, o “mujer en flor”, es el nombre del programa piloto de la Corte de Mujeres de Oʻahu, un proyecto revolucionario diseñado para ofrecer alternativas al encarcelamiento a mujeres involucradas en el sistema de justicia penal a causa de delitos no violentos. Este enfoque innovador busca tratar las raíces subyacentes de sus problemas, como el abuso, la pobreza, las enfermedades mentales o los trastornos por consumo de sustancias. Ahora, legisladores y defensores están trabajando para hacer que este programa sea permanente y expandirlo a las islas vecinas de Hawái.
Un enfoque único: justicia restaurativa
Desde su creación en 2022, la Corte de Mujeres de Oʻahu ha logrado resultados impresionantes. Hasta agosto de 2024, 83 mujeres habían sido derivadas al programa, de las cuales 81 completaron evaluaciones para determinar sus niveles de riesgo y necesidades. Participantes han logrado hitos significativos, como graduarse de programas de tratamiento contra el abuso de sustancias, encontrar empleo o asegurar una vivienda estable.
Este tribunal ofrece una estructura de apoyo integral. Las participantes deben asistir a audiencias regulares, reunirse con oficiales de libertad condicional, participar en sesiones de tratamiento personalizadas y tomar clases que promuevan la recuperación. Entre las herramientas utilizadas se incluyen programas como Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos. Para muchas, este proceso representa una oportunidad de rediseñar sus vidas bajo un paradigma de sanación, en lugar de castigo.
La importancia de la expansión
La Legislatura de Hawái está evaluando propuestas para replicar este modelo en Maui, Kauaʻi y la isla de Hawái. Legisladores como la representante Mahina Poepoe argumentan que las mujeres en estas islas enfrentan desafíos similares a los de Oʻahu y se beneficiarían enormemente de una alternativa que ofrezca vías de rehabilitación y apoyo.
Poepoe destacó que muchas de las mujeres en el sistema de justicia de Hawái son madres y cuidadoras principales, lo que agrava las consecuencias sociales de su encarcelamiento. Además, subrayó que las mujeres hawaianas nativas están representadas de manera desproporcionada en el sistema penal del estado. Por ello, un enfoque que priorice la restauración sobre la retribución es crucial para reducir estas estadísticas.
Un problema nacional
El aumento del encarcelamiento femenino no es un problema exclusivo de Hawái. Según un informe de The Sentencing Project, la población de mujeres encarceladas en los Estados Unidos ha crecido un asombroso 585% desde 1980, alcanzando las 180,684 internas en 2022. Este aumento exponencial refleja fallas en cómo el sistema aborda temas como la pobreza, la salud mental y los trastornos por consumo de sustancias.
En Hawái, estadísticas recientes muestran que 30 de cada 100,000 mujeres están encarceladas, por debajo de la media nacional de 49 por 100,000. Sin embargo, para aquellos comprometidos con la justicia social, cada número representa una vida impactada y una familia afectada.
Retos y apoyo legislativo
A pesar de su éxito, el futuro del programa no está asegurado. El financiamiento actual para Mohala Wahine expira el 30 de junio de este año, y los defensores creen que sin una asignación presupuestaria permanente, los avances logrados podrían perderse. Durante su reciente discurso sobre el estado de la judicatura, el juez jefe de Hawái, Mark Recktenwald, hizo un llamado urgente a los legisladores para garantizar la continuidad del programa y asegurar financiación para ampliarlo a otras islas.
Los costos iniciales para replicar este modelo son inciertos, pero los defensores argumentan que el beneficio social compensa ampliamente la inversión. Además de personal judicial, los proyectos de ley proponen la contratación de trabajadores sociales a tiempo completo, lo cual es crítico para atender las necesidades únicas de las participantes.
Transformación y futuro
El éxito de Mohala Wahine ha hecho que las participantes sean vistas, no solo como números en una hoja de cálculo, sino como mujeres capaces de reformar y transformar sus vidas. La jueza Trish Morikawa y su equipo han sido fundamentales para este esfuerzo, describiendo a las mujeres en programa como "ejemplos vivos del triunfo sobre la adversidad".
En un sistema que históricamente ha priorizado el castigo sobre la rehabilitación, el modelo de la Corte de Mujeres se presenta como un faro de esperanza. Al trabajar con la persona en su totalidad —sus traumas, sus luchas y su contexto social—, Mohala Wahine ofrece una oportunidad real de cambio.
Reflexión final
El programa Mohala Wahine no solo ha demostrado ser una alternativa viable al encarcelamiento, sino también una herramienta poderosa para la justicia restaurativa. Si se logra asegurar el financiamiento necesario y expandir este modelo a las islas vecinas, Hawái podría convertirse en un líder a nivel nacional en el tratamiento equitativo y humano de mujeres en el sistema judicial.
