Evgenia Shishkova y Vadim Naumov: Una vida dedicada al patinaje que terminó en tragedia

Los campeones mundiales y prestigiosos entrenadores rusos dejaron un legado imborrable en el patinaje artístico antes de su trágica partida.

La comunidad del patinaje artístico está de luto tras la trágica pérdida de la pareja de entrenadores y ex campeones mundiales Evgenia Shishkova y Vadim Naumov. Su fallecimiento en un accidente aéreo ha dejado al deporte sin dos de sus figuras más icónicas, quienes dedicaron su vida no solo a alcanzar la cima competitiva, sino también a formar nuevas generaciones de patinadores.

El inicio de una trayectoria legendaria

Evgenia Shishkova y Vadim Naumov comenzaron a patinar juntos en los años 80 en la entonces Unión Soviética. Su química en el hielo rápidamente los catapultó a la cima del patinaje artístico. Representaron a su país en dos Juegos Olímpicos y lograron el oro en el Campeonato Mundial de Patinaje Artístico en 1994, en Chiba, Japón. Este logro marcó el punto culminante de su carrera, apenas un mes después de haber quedado cerca del podio en los Juegos Olímpicos de Lillehammer.

La transición hacia el coaching

Tras la disolución de la Unión Soviética, Shishkova y Naumov siguieron los pasos de muchos otros atletas rusos y emigraron a Estados Unidos en busca de nuevas oportunidades. Establecieron su base como entrenadores en el Skating Club of Boston y el International Skating Center of Connecticut, donde se convirtieron en figuras clave en la escena del patinaje artístico estadounidense.

Ambos entrenadores contaban con más de 20 años de experiencia y estaban certificados como instructores deportivos en San Petersburgo, Rusia. Entre sus alumnos destacados se encontraba su propio hijo, Maxim Naumov, quien ganó el Campeonato Nacional Junior de Estados Unidos en 2020 y actualmente compite en eventos internacionales.

Un trágico final

La tarde del accidente, Shishkova y Naumov regresaban de un campamento de desarrollo en Wichita, Kansas, donde trabajaban con jóvenes patinadores prometedores. El avión en el que viajaban se estrelló tras colisionar con un helicóptero del ejército cerca de Washington. Entre los fallecidos también se encontraban dos patinadoras adolescentes y sus madres, quienes eran parte del club de Boston.

La Federación de Patinaje Artístico de Rusia expresó sus condolencias en un comunicado: “Estamos profundamente impactados por esta tragedia. Evgenia y Vadim hicieron una contribución significativa al patinaje artístico ruso y global, y llevaremos su legado en nuestros corazones”.

El legado en el patinaje artístico

Shishkova y Naumov no solo fueron reconocidos por sus logros competitivos, sino también por su capacidad para inspirar y formar a jóvenes atletas. Uno de sus mayores logros como entrenadores fue preparar a su hijo Maxim Naumov para competencias de alto calibre, incluyendo ser nombrado miembro del equipo estadounidense para el Campeonato de los Cuatro Continentes.

Lyudmila Velikova, exentrenadora de la pareja, expresó a la prensa rusa que Shishkova y Naumov eran “muy respetados y solicitados” en el mundo del patinaje. Su dedicación y pasión por el deporte dejaban huella en todos los que trabajaban con ellos.

Una pérdida irreparable

Este trágico accidente ha afectado profundamente tanto a la comunidad de patinaje artístico en Rusia como en Estados Unidos. En el corazón de la afición y de aquellos que los conocieron, Shishkova y Naumov serán recordados no solo como campeones mundiales, sino como mentores, innovadores y personas que dedicaron su vida al arte del patinaje.

Este suceso subraya la vulnerabilidad de la vida y el impacto duradero que los grandes entrenadores y atletas pueden tener en sus respectivas disciplinas. La herencia de Evgenia y Vadim seguirá viva en las sonrisas y giros de los patinadores que llevan su legado dentro y fuera del hielo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press