Los desafíos del retorno en Gaza: Una tregua inquieta y lo que está en juego
Después de más de un año de desplazamiento, miles de palestinos enfrentan un panorama de destrucción al regresar al norte de Gaza bajo una frágil tregua entre Israel y Hamas.
La Franja de Gaza se encuentra en un momento crítico. Tras la devastadora guerra de 15 meses entre Israel y Hamas, una tregua temporal ha permitido que miles de palestinos regresen al norte del territorio por primera vez desde que comenzó la escalada de violencia en octubre de 2023. Sin embargo, este retorno se da en un contexto incierto y lleno de desafíos, tanto políticos como humanitarios.
Regreso a una tierra devastada
Más de un millón de palestinos fueron desplazados al sur de Gaza en los primeros días del conflicto, tras la orden de evacuación masiva dada por Israel y la posterior entrada de tropas terrestres en la región norte del enclave. Ahora, después de más de un año viviendo en refugios temporales, escuelas convertidas en albergues y campamentos de tiendas, los residentes están volviendo a sus hogares, aunque las imágenes de la destrucción masiva han sido desalentadoras.
Ismail Abu Mattar, un padre de cuatro hijos que pasó días esperando regresar a su hogar en la Ciudad de Gaza, describió la situación como "un mar de gente" dirigiéndose hacia el norte. "Fueron tres días de infierno", dijo Mattar. "Temíamos que la tregua colapsara y no pudiéramos regresar".
Una tregua frágil en medio de tensiones
El acuerdo de tregua, mediado por actores clave como Qatar, tiene como objetivo poner fin a uno de los conflictos más letales entre Israel y Hamas. Hasta ahora, el intercambio de prisioneros ha sido una pieza central del acuerdo; Hamas ha liberado a un total de siete rehenes, incluidos cuatro soldados israelíes, mientras que Israel ha liberado a más de 300 prisioneros palestinos. Sin embargo, las negociaciones para la liberación de los rehenes restantes y el intercambio correspondiente han estado plagadas de disputas.
Por ejemplo, la apertura de los cruces hacia el norte fue retrasada por la exigencia de Israel de la liberación de Arbel Yehoud, una civil israelí. Tras intensas conversaciones, incluida la mediación de Qatar, se garantizó la liberación de Yehoud junto con otros dos rehenes, pero esta incertidumbre pone de relieve lo delicado del acuerdo.
Hamas y la interpretación del retorno
Para Hamas, el regreso de los residentes al norte simboliza una "victoria" frente a Israel y el fracaso de lo que consideran planes para trasladar masivamente a los palestinos fuera de Gaza. Este retorno podría ser interpretado como un rechazo a propuestas previas, incluidas especulaciones como las planteadas por el expresidente Donald Trump, quien en su momento sugirió la reubicación de palestinos en países vecinos como Egipto y Jordania.
El impacto humano del conflicto
La guerra ha dejado un saldo devastador. Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 47,000 palestinos han muerto, más de la mitad de ellos mujeres y niños. Israel, por su parte, afirma haber matado a más de 17,000 combatientes de Hamas, aunque sin proporcionar pruebas específicas. Además, el conflicto ha dejado al 90% de la población desplazada, lo que ha llevado a múltiples reubicaciones dentro del pequeño territorio y al colapso casi total de la infraestructura básica.
La situación humanitaria sigue siendo desesperante. Incluso entre aquellos que regresan al norte, muchos descubren que lo que una vez fueron sus hogares ahora son escombros. Las necesidades de reconstrucción, agua, electricidad y alimento son inmensas, y la comunidad internacional enfrenta presiones para proporcionar ayuda de emergencia.
Lo que sigue en la tregua
El acuerdo actual tiene una duración inicial de seis semanas y contempla la liberación total de 33 rehenes por parte de Hamas, a cambio de la liberación de 2,000 prisioneros palestinos. Sin embargo, la segunda fase de negociaciones, que se perfila mucho más compleja, se centrará en los aproximadamente 60 rehenes que Hamas aún mantiene cautivos.
Israel, bajo el liderazgo del primer ministro Benjamin Netanyahu, ha reiterado su compromiso de destruir la infraestructura de Hamas y acabar con su gobierno de casi 18 años en Gaza. Por su parte, Hamas exige el fin total de las hostilidades para continuar con la liberación de rehenes.
La sombra del conflicto que persiste
Expertos internacionales señalan que incluso con la tregua, las raíces del conflicto permanecen intactas, alimentadas por décadas de tensión, bloqueo económico y disputas territoriales. La comunidad internacional, liderada por actores como Naciones Unidas y gobiernos regionales, enfrenta la difícil tarea de mediar para evitar un retorno a los enfrentamientos.
Mientras tanto, las familias que intentan reconstruir su vida en Gaza lo hacen bajo la constante amenaza de un colapso de la tregua y el temor de que cualquier paso hacia adelante sea revertido por una nueva ola de violencia.
