La Energía Geotérmica en Estados Unidos: ¿Por qué Está Ganando Popularidad?
Un análisis sobre cómo la administración Trump impulsó esta fuente renovable alineada con la industria de combustibles fósiles.
En un giro inesperado dentro de la política energética de Donald Trump, caracterizada por un fuerte apoyo al petróleo, gas y carbón, la energía geotérmica logró destacarse como una rara excepción en su agenda. Aunque otras energías renovables fueron dejadas de lado, esta fuente de energía limpia y confiable ha captado la atención tanto de su administración como de sectores clave del Congreso.
¿Qué es la energía geotérmica?
La energía geotérmica es una fuente renovable que utiliza el calor del interior de la Tierra para generar electricidad. A través de la perforación de pozos profundos, se extrae vapor o agua caliente que luego se usa para mover turbinas que generan electricidad. A diferencia de fuentes intermitentes como la solar o eólica, la energía geotérmica produce electricidad las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Según el Departamento de Energía de los Estados Unidos, esta fuente podría proporcionar hasta 90 gigavatios de capacidad para el año 2050, suficiente para abastecer a 65 millones de hogares.
Apoyo bipartidista y su conexión con la industria del petróleo y gas
Una de las razones principales por las que la energía geotérmica ha encontrado su lugar dentro de una administración que favorecía los combustibles fósiles es su similitud técnica con la extracción de petróleo y gas. Muchas de las tecnologías y prácticas utilizadas en ambas industrias son compartidas, desde la perforación de pozos hasta el uso de equipos específicos.
Además, figuras clave en la administración Trump, como Chris Wright, ex ejecutivo de la industria de combustibles fósiles y Secretario de Energía, apoyaron firmemente la energía geotérmica. Wright afirmó en su audiencia de confirmación que está 'emocionado por el potencial de la geotermia como un recurso energético abundante justo debajo de nuestros pies.'
La posición de Trump frente a otras renovables
Mientras la energía geotérmica recibió un impulso, la administración Trump dificultó el desarrollo de otras renovables, como la energía eólica y solar. Por ejemplo, las ventas de arrendamientos para proyectos de eólica marina fueron suspendidas, y las aprobaciones para estos proyectos enfrentaron retrasos significativos. Trump incluso llegó a calificar las turbinas de viento como "horribles" y declaró que solo funcionan bajo subsidios.
En contraste, se incluyeron otras fuentes de energía como la energía hidráulica y la nuclear en los respaldos de políticas energéticas, mientras que la geotermia obtuvo mención especial como una opción prometedora.
Proyecciones y desafíos futuros
El futuro de la energía geotérmica parece prometedor. Empresas como Fervo Energy y Sage Geosystems, muchas de las cuales incluyen antiguos ejecutivos de la industria del petróleo y gas, están impulsando innovaciones que podrían hacer que esta tecnología sea accesible en más regiones de los Estados Unidos.
Sin embargo, esta industria todavía enfrenta obstáculos significativos. La burocracia en los procesos de permisos, la necesidad de financiamiento federal para investigación y desarrollo, y los altos costos iniciales son barreras que deben superarse para que la energía geotérmica alcance todo su potencial durante esta década.
¿Estamos entrando en la 'década de la geotermia'?
Con declarados objetivos de aumentar la capacidad energética renovable, la energía geotérmica tiene el potencial de convertirse en una pieza clave para la transición energética de los Estados Unidos. Cindy Taff, CEO de Sage Geosystems, afirmó que 'si los proyectos geotérmicos logran multiplicarse rápidamente, los costos disminuirán, y eso será beneficioso para todos.'
La comunidad científica y empresarial parece optimista. Según Terra Rogers, directora del programa en Clean Air Task Force, 'la geotermia tiene riesgos, pero también enormes oportunidades, y es una solución fundamental para combatir el cambio climático.'
En un contexto donde el cambio climático y la diversificación energética son prioridades globales, la energía geotérmica podría finalmente ganar el protagonismo que merece.