Choques en mayor sindicato indígena y campesino aumentan crisis en partido gobernante en Bolivia

LA PAZ, Bolivia (AP) — Una batalla campal entre seguidores del ex mandatario Evo Morales con afines al actual presidente Luis Arce dejó el domingo a cientos de contusos y profundizó la crisis a lo interno del partido gobernante en Bolivia.

Los choques entre oficialistas tuvieron lugar durante el congreso del mayor sindicato de indígenas y campesinos que respalda al gobierno, según informes de la policía y de autoridades.

Los participantes se lanzaron sillas, se golpearon con palos y chicotes en medio de tensas deliberaciones para elegir a una nueva directiva de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB).

“El enfrentamiento se dio en medio del consumo de alcohol” en plenas deliberaciones, dijo el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos. No hubo detenidos, aseguró.

La ministra de Salud, María René Castro, dijo que hay “450 contusos”, entre ellos un policía que resultó herido. “Hubo mucha violencia dentro del escenario de las deliberaciones, con muchos heridos que tuvimos que movilizar a tres ambulancias”.

Por su parte, Morales (2006-2019) acusó al presidente Arce, su heredero político, de haber ordenado “que la policía gasificara el congreso campesino”. Ríos negó la acusación y dijo que “grupos de choques” enfrentados usaron gas lacrimógeno.

Un contingente policial resguardaba las oficinas de la CSUTCB en el centro de La Paz ante el temor de que sea tomado por la fuerza por los bandos encontrados.

El congreso comenzó el viernes en medio de tensiones entre quienes apoyan el regreso de Morales al gobierno en los comicios de 2025 y otros que respaldan un segundo mandato de Arce.

El gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) afronta fuertes pugnas internas. Morales es jefe de ese partido y es un duro crítico de Arce.

Los analistas dicen que el MAS, en el gobierno desde 2006, afronta una crisis interna desde 2019 cuando Morales renunció tras las elecciones de ese año denunciadas de fraudulentas, lo que atizó un estallido social que dejo 37 muertos.

El MAS regresó al poder tras ganar los comicios de 2020 con Arce después del gobierno interino de la opositora Jeanine Áñez.

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